BILBAO- Loraldia, festival de la cultura euskaldun contemporánea que se celebra en primavera en Bilbao, arrancará su III edición en el Arriaga el martes 7 con el espectáculo de Ez Dok Hiru! Euskal Musikaren Benetakoa historia. Hasta el 8 de abril, este festival, en el que colabora DEIA, ofrecerá en diversos escenarios una treintena de producciones de diferentes especialidades artísticas con el nexo común del atrevimiento, la diversidad y el euskera. “Estamos en un momento de calidad elevada, como nunca”, asegura Imanol Agirre, director de Loraldia, en el que participarán Kukai, Urdangarin, Lou Topet, Ohiana Bartra, Kirmen Uribe, Garbi Losada, Lutxo Egia, Itu Banda?

Ni en los mejores sueños consideraría que el festival lograra el salto cuantitativo logrado en esta tercera edición ¿no?

-Algún compañero tuyo me ha preguntado si estaba planificado desde el inicio (risas). Ha sido realmente un éxito y ha encantado tanto a organismos públicos, que nos han dado cobertura con ayudas públicas, como a los agentes culturales y al propio público. Ahora nos estamos acercando mucho al festival que teníamos soñado.

Las cifras apabullan en 2017.

-Sí, son 30 espectáculos, 150 artistas, dos producciones propias, acuerdos diversos con el Teatro Arriaga, el Campos, Azkuna Zentroa, Museo Guggenheim Bilbao, Pabellón 6, Fundación Athletic? Empezamos con cuatro jornadas solo.

¿Cuál cree que es el secreto de este crecimiento?

-Que existía una necesidad de que la cultura vasca tuviera un calendario claro y en primavera. La gente necesitaba una referencia como Loraldia, que ofrece un programa profesional y con una buena comunicación. Por eso ha cuajado y, creo también, por la predisposición de los agentes culturales, que han enriquecido nuestras ideas.

Quizá la clave sea su carácter integrador, ya que la oferta cultural euskaldun está viva, casi a diario, en la capital vizcaina.

-Sí, es lo que dices. Creadores hay, muchos y de gran calidad. Cuando la gente me pregunta cómo veo la cultura vasca actual, siempre respondo que estamos en un momento de calidad elevada, como nunca. El problema es la visibilidad; de ahí que utilicemos el formato de festival aunque esté ya muy utilizado. Nosotros nos centramos en una oferta en euskera, en primavera y profesional.

Y así han logrado un éxito impensable.

-Pero nos queda mucho por hacer, como que la gente castellano-parlante se atreva a conocer y a gozar de la cultura euskaldun. Empezando por la música, las artes escénicas o el cine subtitulado. En algunos casos la palabra no tiene tanta fuerza y ese trabajo de visibilidad es uno de nuestros grandes retos.

El subtítulo del festival es ‘Euskal Kultura Gaur’. ¿El programa de este año lo refleja como tal?

-Creo que sí, ya que apuesta por lo contemporáneo, lo nuevo y lo actual; y con un componente de riesgo y de andar sobre la cuerda floja apoyando a nuevos valores que están empezando. Se advierte al combinar al ya clásico Mikel Urdangarin, que dará en Loraldia el primer concierto de presentación de su disco nuevo, con la joven Izaro, por ejemplo, que está empezando y se arriesga cantando en euskera pero también en inglés y castellano.

Riesgo, actualidad? y diversidad también ¿verdad?

-Claro, ya que intentamos abarcar todos los ámbitos de la cultura, pero nos seguimos quedando cortos. Hay que incluir más gastronomía, artes plásticas, fotografía? Tenemos campos de ampliación y mejora porque contamos con ideas. Y otra característica importante sería la fusión y el provocar encuentros entre diferentes especialidades artísticas.

Este año hay muestras de ello.

-Sí, como el corto Euskadi Sinfonia, que aúna el cine, por un lado, y la danza con tres miembros de Kukai, o el encargo al escritor Kirmen Uribe de escribir un texto centrado en el futuro, sobre el que improvisarán los bertsolaris Ohiana Bartra y Alaia Martin con la banda sonora del guitarrista Angel Unzu.

Otro avance cualitativo descansa este año en la producción propia.

-Su fin es estimular y provocar la creación en el ámbito cultural. Es una de las señas del festival y ya el año pasado se impulsó Bilbronx, una iniciativa bonita y novedosa que se repite este año buscando al público juvenil. Ahora nos metemos en grandes producciones, caso de Strip-tease, en la que cuatro directores de escena -Fernando Bernués, Mireia Gabilondo, Jokin Oregi y Garbi Losada- presentarán propuestas diferentes sobre el striptis.

La segunda producción propia es musical.

-Encargamos al magnífico y casi desconocido grupo Lau Topet un homenaje a Pete Seeger en euskera. Como invitados contarán con Eñaut Elorrieta (Ken Zazpi), Izaro, Aiora Renteria (Zea Mays), el histórico Anje Duhalde y Joseba Irazoki. La adaptación de las letras de Seeger, que son necesarias porque remueven conciencias, corre a cargo de Harkaitz Cano.

En el ámbito teatral la oferta es amplia y cuenta con el importante estreno de Loraldia Eskola.

-Este es un proyecto para la transmisión de la cultura vasca, uno de nuestros retos. Las nuevas generaciones deben conocer nuestras referencias. Jóvenes de 12 y 13 años de las ikastolas Urretxindorra y de Deusto están trabajando una pastoral, Lore jokoak eskola ekimena, que aglutinará teatro, danza, música y bertsos.

En cine se recupera ‘Euskadi’.

-Sí, en colaboración con la UPV/EHU, se ha rescatado un cortometraje rodado hace 80 años sobre Euskadi por el realizador francés Rene Le Hennaff en una técnica parecida al 3D.

Y no solo se proyectará en Bilbao.

-Así es, se hará una gira pequeña, empezando en Iruñea y luego por Donostia y Baiona. Nuestras producciones tendrán su pequeño circuito exterior; estamos trabajando en ello y existe una recepción importante.

Cada persona contará con un espectáculo a su gusto. Además de los ya comentados ¿cuál destacaría usted del resto?

-(Apenas duda). A quien le guste la poesía le recomendaría Itu Banda porque es una novedad y ofrece cosas diferentes al unir poesía y música. Por el contrario, el gran público disfrutará del espectáculo de Kukai, con Martikorena, Iñaki Salvador?

¿Y en 2018? ¿Hay espacio para el crecimiento?

-Loraldia tiene todavía mucho recorrido y, por ello, vamos a trabajar tomando riesgos con la gente joven y de calidad. Y produciremos otros espectáculos, desde ópera a un espectáculo sobre The Beatles. Se podría decir que están en el borrador de 2018 (risas).