BARCELONA. Todo apunta a que una novela de temática femenina y costumbrista se alzará hoy con el codiciado Premio Planeta. En total se han presentado 478 originales, 16 procedentes de Euskal Herria, a esta sexagésimo segunda edición, en la que la mayoría de los diez finalistas ha ocultado su nombre bajo un pseudónimo. Los rumores en torno a la identidad del posible vencedor se sucedieron ayer en la rueda de prensa celebrada en Barcelona y en los posteriores encuentros entre periodistas, donde sonaron nombres como Clara Sánchez (ganadora del Premio Nadal en el 2010), Jorge Molist, María Dueñas, Lola Beccaria, Juan Villoro, Rosa Montero o Boris Izaguirre (finalista del Premio Planeta en el 2007).

El Premio Planeta de Novela, el más importante de las letras hispánicas, está dotado con 601.000 euros para la obra ganadora y 150.250 euros para la finalista. En palabras de José Manuel Lara Bosch, presidente del Grupo Planeta, el año pasado se superaron los 40 millones de ejemplares vendidos y ya son 20.000 autores los presentados al premio. A pesar de estas cifras, Lara reivindicó ayer los derechos de autor y señaló la piratería como uno de los mayores problemas de la propiedad intelectual, a la que calificó de "sagrada". En ese sentido, sobre la integración del libro digital en la industria editorial, aseguró que "o se resuelve bien o moriremos".

El jurado del premio, compuesto por Alberto Blecua, Ángeles Caso, Juan Eslava Galán, Pere Gimferrer, Carmen Posadas, Rosa Regàs y Emili Rosales, señaló una voluntad generalizada por parte de los autores para acercarse a la realidad circundante a través de la intriga o la emoción. En cuanto a la temáticas, Rosales admitió que es "difícil buscar una tendencia general"; sin embargo, aseguró que muchas de las novelas "bucean entre los miedos y los anhelos, con la esperanza de que el lector se sienta identificado".