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Zumeta y Donezar, en Ekain

Donostia

en conexión con la última obra presentada en el Pabellón de Mixtos de Pamplona el año pasado, José Luis Zumeta (Usurbil, 1939 ) presenta en Galería Ekain de Donostia un conjunto de 23 pinturas sobre papel, realizadas con tempera y barras de color sobre acuarelas, de formato pequeño y medio, realizadas durante su reciente estancia en Buenos Aires.

En ellas sigue plasmando, de manera libre y desenfadada, su personal microcosmos, poblado de figuras, antropoides y retratos de toda suerte y pelaje, entre los que observamos personajes con ojos y miembros marcados, trazados con negras líneas de cierre y cargados de colores fuertes y violentos, rojos, violetas, azules, verdes y amarillos. Sus figuras aparecen aisladas, individuales e introvertidas, que se mueven o pasean sobre fondos neutros o coloreados con tonos suaves y con trazos de colores y rasgos rápidos. Todo responde a una pintura automática, descontrolada hasta cierto punto, pero siempre dentro de unos parámetros vitales, tensionados, cargados de movimiento y de vida. Hay como una pasión por el color y la figura desestructurada, en la línea de los Miró, Picasso, el Grupo Cobra, o el más cercano Bonifacio. Su síntesis personal y su enorme voracidad lo fagocita todo, para crear un mundo personal y propio, que oscila entre el expresionismo gestual y el figurativo. Pintura síntesis y mix, como se da siempre en la historia del arte y entre los grandes creadores.

Pablo Donezar (Donostia, 1948) presenta seis jaulas metálicas de pequeño tamaño, ubicadas en la parte alta de las paredes de la galería, de carácter conceptual y con una marcada sintaxis geométrica cinetista. Realizadas en acero corten, de cada una de ellas cuelgan pequeños elementos humanizadores, cadena, candado, chapas de identificación, ovejas, que les confieren una cierta carga social y de denuncia, aunque las esculturas funcionan ellas solas de manera autónoma, sin necesidad de otro tipo de aditamento o de carga literaria.

Donezar sigue siendo ese outside de las artes guipuzcoanas, buen constructor, cargado de un fuerte hermetismo y un sabio geometrismo. Quizás debiera desmelenarse un poco, pero cada uno es como es y este creador persiste en el empeño.