bilbao. Tres piezas de tamaño monumental del artista norteamericano Richard Serra llegaron el sábado de madrugada al Museo Guggenheim de Bilbao para formar parte de la exposición Brancusi-Serra, que este centro de arte dedicará en octubre a estas dos grandes figuras de la escultura contemporánea.
Las obras, tituladas Circuit-Bilbao (1972), The Consequence of Consequence (2011) y 1,2,3,4,5,6,7,8 (1987), fueron transportadas hasta el Guggenheim por carretera en grandes camiones especiales procedentes de sendos almacenes situados en las localidades alemanas de Dillinger y Bochum, informaron a Efe fuentes del museo bilbaíno.
La obra más espectacular de las tres es Circuit-Bilbao, formada por cuatro planchas de acero laminado de 240 cm de ancho, 1.150 cm de largo y 3 cm de grosor, y 1,2,3,4,5,6,7,8, compuesta por otras ocho láminas de acero de 5 centímetros de grosor y 184,8 cm de ancho y 400 cm de largo, pertenecientes ambas a la colección privada del escultor norteamericano.
Las cuatro grandes planchas de Circuit-Bilbao fueron concebidas por Serra para ser colocadas en cada una de las cuatro esquinas de la sala donde se exhiban, dejando en el centro un espacio abierto a través del cual puede circular el espectador, con el objetivo de dividir y condicionar el espacio de la estancia.
Las ocho láminas de 1,2,3,4,5,6,7,8, una vez unidas en el centro, adoptan una forma octogonal que puede recordar a las aspas de un gigantesco ventilador.
The Consequence of Consequence está formada por dos pesados bloques de acero macizo de 8,5 toneladas cada uno y de dimensiones 88,9 x 101,6 x 114,3 cm, cada uno, ideados por el artista californiano para ser colocados uno frente al otro en distintas orientaciones. Tras llegar a la capital vizcaína, se procedió a su descarga pasada la medianoche en la explanada del museo, donde se ubica la popular escultura del perro Puppy, de Jeff Koons.
Las planchas que conforman las esculturas fueron descargadas por separado y quedaron almacenadas en la citada explanada hasta que hoy comiencen a ser introducidas en el interior del museo para su montaje, que se prolongará hasta el próximo sábado, en tres de las salas clásicas de la segunda planta, de dimensiones apropiadas para dar cabida a estas grandes obras.
Las tres piezas forman parte del cerca de medio centenar de obras de ambos artistas que van a conformar la última gran exposición temporal del Museo Guggenheim Bilbao de este año, en la que se confrontará la creatividad de dos de los considerados grandes genios de la escultura contemporánea, el norteamericano Richard Serra (1939) y el rumano criado profesionalmente en Francia Constantin Brancusi (Hobita, 1876-París, 1957).
La muestra también pretende explorar la relación existente entre ambos artistas, así como poner de manifiesto sus similitudes y diferencias a la hora de concebir el dinamismo espacial y temporal de la escultura, según señalan las fuentes del Guggenheim Bilbao.
De las tres esculturas llegadas a Bilbao, sólo The Consequence of Consequence pudo ser contemplada anteriormente, en la galería Beyeler de Basilea, la ciudad suiza que acogió hasta el pasado 21 de agosto esta exposición, producida conjuntamente por el Guggenheim bilbaino y la Fondation Beyeler.