EN Aroa Botikazar triunfa el gusto por el detalle en cada una de sus elaboraciones, desde un café bien preparado con la maestría de un barista profesional como es Erlantz Aurrecoechea, hasta la cerveza bien tirada, a elegir entre cinco variedades, y algunas internacionales. Pero si algo distingue a esta gastrotaska -como ha bautizado a su establecimiento este joven innovador y creativo en la cocina- son las croquetas, que constituyen la especialidad de la casa.
De hecho, Aroa Botikazar ha reinventado la croqueta, que adoptan allí hasta una forma peculiar, cuadrada. Tienen 17 variedades diferentes, la mayor parte saladas y hasta dos dulces. Sorprendentes la de chocolate negro con plátano y nueces y la de chocolate blanco, piña y almendras con copos de maíz por fuera. Y con nuevos sabores en proyecto, como la versión de la cheesecake en croqueta. O la que Erlantz tiene en mente, a base de pollo al curry con piña. Porque las sorpresas para el paladar no cesan en la barra del Aroa Botikazar.
Muy ricas, a juzgar por sus clientes, son las croquetas de jamón y la itsas croqueta, a base de mejillones, chatka y anchoas, o la de chipirón con ali oli de miel. El universo de variedades llega a numerosos platos adaptados a la forma de la croqueta, o mejor dicho, de los kroketos, como los denomina su creador. Siempre en continua innovación, sus croquetas “hablan idiomas”, ya que en agosto, Erlantz las presentó en el restaurante Txokoa de Berlín y ya baraja la idea de abrir un obrador y distribuirlas.
Cualquiera que sea la elección, las venden como pintxo, por unidad, o en raciones de media docena.
Otro de los pilares gastronómicos de su negocio se asienta en la selección de tostas. La más vendida es la de puré de boniato, pulpo a la plancha, ali oli de miel, pimentón de la Vera y sal de vino, que se puede tomar también en versión croqueta. Igualmente peculiar resulta la tosta de ensalada Caprese en versión tosta, con tomate, mozarella de búfala, aceituna negra y pisto de albahaca.
Por otro lado, en el rincón donde este joven hostelero sin fronteras cultiva su faceta de barista se puede elegir entre un café escocés, irlandés, cubano, jamaicano... y el café tonic, cuya versión 3.0 presentará al Campeonato de Baristas de Euskadi en junio.
En conjunto, la oferta diferenciada, rompedora y ambiciosa de Aroa Botikazar ha tenido muy buena acogida desde que comenzara su andadura, el pasado mes de octubre, entre una clientela de mediana edad que encuentra allí un ambiente donde sentirse a gusto, con conciertos en acústico una vez al mes.