Londres - El duque de Westminster falleció ayer por un infarto de miocardio a los 64 años, según informaron los medios locales. El duque poseía una fortuna valorada en aproximadamente unos 10.000 millones de euros, que irá a parar a uno de sus hijos, Hugh Grosvenor. El padrino del príncipe George, con tan solo 25 años, heredará el ducado y la totalidad de sus bienes. El duque, según la revista Forbes, se encontraba en el puesto número 3 en la lista de los hombres más ricos de Reino Unido y en la 68ª posición del mundo. Ahora, estos puestos los ocupará su hijo. - E. P.
