Es prácticamente inevitable que cada cierto tiempo haya que cambiar el router de casa para ir mejorando la red doméstica. A veces el técnico se lleva el aparato jubilado y a veces no, incluso el informático de la casa es el encargado de hacerlo él mismo. Pero una vez finalizada con éxito la sustitución, viene la pregunta “y el router viejo, ¿dónde va? ¿al cubo de varios, al punto limpio, se guarda…?”. Una vez entrados en la dinámica del reciclaje, quizá el planteamiento correcto debiera ser cómo darle una nueva vida y que siga siendo útil.

Por ello queremos proponer cinco usos alternativos que se le pueden dar y que además mejoran la calidad de una red doméstica.

La clave de la vida nueva de los routers viejos está principalmente en las conexiones ethernet. PIcxabay

1. Convertirlo en un repetidor wifi para ampliar su alcance

Puede que haya espacios en la casa a la que no lleguen el wifi con suficiente potencia y se produzcan problemas de conexión. En estos casos, un router jubilado puede ser de ayuda. Con un cable de ethernet puede bastar para conectarlo al nuevo y así configurarlo como un repetidor que mejore el alcance. Si es el cable es lo suficientemente largo, se puede llevar hasta otra habitación. Incluso si es el router adecuado, puede ser amplificador y prescindir del cable.

Además, al contar con otras conexiones, con otros puertos, se puede conectar directamente algún aparato y mantener la velocidad de conexión. Puede ser un ordenador, una televisión u otro aparato que sea compatible.

2. Convertirlo en un switch, o conmutador, para conectar en red varios aparatos

A modo de prólogo, explicar que un switch o conmutador es un dispositivo que sirve para conectar varios elementos dentro de una red y que cada dispositivo conectado mande mensajes o archivos a otro dispositivo concreto. Por lo general, los routers van equipados con varias conexiones de ethernet a los que puedes conectar dispositivos para acceder a Internet y a la red local.

Conectando con un cable el viejo router, se puede disponer de nuevas conexiones que permitan conexiones estables y poder obviar las conexiones inalámbricas. Además, al igual que en el caso anterior, con un cable lo suficientemente largo, lo podemos llevar a otra estancia y no amontonar aparatos en una sola estancia.

Los routers pueden convertirse en un puente de conexión entre diferentes aparatos para formar una red. Pixabay

3. Disponer de una red wifi solo para los invitados

La situación es común: llega alguien a casa y pide la contraseña del wifi para conectarse, bien porque lo necesite por una causa de fuerza mayor bien por ser un adolescente que no puede vivir sin conexión ni en una visita de poco rato. ¿Y si no se quiere compartir ni la contraseña ni el nombre de la red doméstica? Pues la solución puede ser crear una segunda red para estos casos con un contraseña diferente a la oficial.

Tan sencillo como conecta el viejo router al nuevo por el inevitable cable ethernet y configurarlo en modo bridge para que la entrada pase a ser una red wifi. Configurando un SSID (la WLAN o nombre de la red) y una contraseña diferentes y así no habrá compartir dicho nombre de red y su contraseña cuando alguien te pregunte por tu conexión a Internet.

4. Aprovecha sus puertos para conectar dispositivos nuevos y antiguos

Aquí es donde la veteranía o la antigüedad del router se convierte en una virtud. De entrada puede tener un puerto USB para conectar unidades a las que dar acceso a través de la wifi. Y entre estos aparatos están esos dispositivos más antiguos que lo tienen complicado para conectarse a internet y los modernos routers se lo ponen difícil cifrados y tecnologías modernas.

5. Experimentar y probar sistemas alternativos

Viene a ser como desmontar un aparato para ver cómo está hecho y poder probar cosas nuevas. Es una aventura para quienes cuentan con conocimientos avanzados ya que no es sencillo hurgar en sus tripas, pero si ya estaba fuera de uso, qué mas da. Una primera posibilidad es instalarle un sistema operativo nuevo distinto del que venga de serie. Open Wrt o Tomato Firmware pueden ser dos de ellos.

Muchas compañías capan sus paneles y opciones de configuración, al igual que algunos fabricantes optan por incluir un software poco completo y estos otros sistemas ofrecen ampliarlas. Investigando un poco en internet se puede encontrar el al mas adecuado al viejo router.