Las instalaciones que la escuela Mendiz Mendi tiene en Muskiz irradian una energía muy positiva. Todos los sábados, salga el sol o llueva, haga frío o calor, los pequeños ciclistas y sus familiares parten desde allí a pedalear por el entorno y eso genera una vitalidad, una alegría y un buen rollo dignos de aplauso. Además, entre semana realizan entrenamientos de técnica. El engranaje lo hacen posible desde la junta directiva, encabezada por Omar Fraile, que, de hecho, da nombre a la escuela desde 2018. Completan el pelotón institucional César Saralegi, Álvaro García, Ángel de Pablo, Joseba Andoni Ajuriaguerra, Augusto Diéguez, Eleder Ríos, Joseba Sanz y Víctor Movilla.

Varios de los pequeños ciclistas de la escuela. M. M.

Afición, valores, pasión, disfrute… Todo ello se pone a rodar desde Muskiz y todo ello es lo que agradece DEIA al conceder a Mendiz Mendi-Omar Fraile Eskola un premio a su labor no profesional. Hay 60 niños y niñas en la escuela, una decena de ciclistas en el equipo juvenil y otros diez, en el cadete. Las primeras pequeñas pedaladas de Omar Fraile –que serían enormes después en carreras profesionales–, fueron allí y el corredor nunca lo olvida. “Omar siempre ha puesto en valor el hecho de salir de aquí”, admite el presidente adjunto, César Saralegi. La participación del ciclista en su escuela no es simbólica. “Está muy implicado”, apunta el tesorero Ángel de Pablo. Pero, además, tienen genética Mendiz Mendi Jonathan Lastra, del Cofidis, y Anne de Pablo, subcampeona de España de ciclocross en dos ocasiones.