Rubén Plaza, rey de Castilla
El alicantino del equipo Movistar gana la tercera etapa y se lleva la general
bilbao. No hubo tres seguidas. Tras las dos victorias en sendas etapas de la Vuelta a Castilla y León, Euskaltel-Euskadi no pudo completar el pleno de victorias en la ronda. Además, las bonificaciones en meta dejaron sin opciones de dar el salto al liderato y el equipo naranja tuvo que conformarse con el cuarto puesto en la general de Pablo Urtasun, el vencedor de la primera etapa. Ayer, el triunfo fue para Rubén Plaza. El alicantino del Movistar supo sorprender con un ataque a poco más de un kilómetro de la meta de Cervera de Pisuerga que le sirvió para ganar la etapa y escalar a lo más alto de la general, llevándose la Vuelta a Castilla y León. Plaza no conseguía un triunfo de etapa desde la Vuelta a Portugal de 2009.
El pelotón afrontaba ayer un trazado de 183 kilómetros bajo un cielo despejado. Desde los primeros kilómetros se iniciaron los intentos de escapada, pero fue Euskaltel-Euskadi quien abortó las primeras iniciativas. Mikel Iturria y Unai Iparragirre del Euskadi sí consiguieron colarse en un grupo de ocho ciclistas que se despegaron del pelotón. Estos aventuraron fueron ascendiendo las diferentes dificultades montañosas de la jornada. A medida que se descolgaban efectivos, otros corredores se sumaban a la aventura, como el gasteiztarra Víctor de la Parte, enrolado en el Tableware griego.
Tras coronar tres ascensiones, Iturria se descolgó de la escapada, dejando la cabeza de carrera mermada de cara a la subida del alto de la Varga. Pero el pelotón ya estaba bajo el dominio de Movistar, que no quería irse de vacío de la vuelta, y pronto se daría caza a los aventureros que sobrevivían de la escapada. A falta de poco más de un kilómetro, Rubén Plaza decidió atacar y solo Francisco Mancebo consiguió seguir su rueda. El alicantino llegó con dos segundos de ventaja sobre el de 5 Hour Energy y siete sobre Carlos Barbero.
Fracturas para Velasco Iván Velasco se fracturó la clavícula y la muñeca izquierda en la Tro Bro León que ganó el francés Francis Mourey.