Gorka Izagirre escuchará propuestas de otros equipos
Acaba contrato esta campaña y espera una oferta de Euskaltel para renovar
bilbao. Como lleva tiempo esperando una oferta de Euskaltel-Euskadi que no acaba de llegar para ampliar el contrato que finaliza esta temporada, Gorka Izagirre, 25 años y uno de los pilares del equipo vasco de cara al futuro y también uno de los sostenes del presente, dijo ayer que mientras eso ocurre, si es que alguna vez tiene que ocurrir, escuchará las propuestas de contrato de otros equipos que estén interesados en ficharle. La ampliación con Euskaltel debería estar cerrada hace tiempo, como estaba apalabrado entre ambas partes, pero la temporada avanza y aún no se ha materializado. "Evidentemente", dice el corredor guipuzcoano, "soy profesional y escucharé a los equipos interesados en contratarme".
Alguno hay porque Gorka es un ciclista apetecible. En tres temporadas con el equipo naranja, Izagirre ha ganado dos veces la Klasika de Ordizia y una etapa en el Tour de Luxemburgo, además de tomarle la medida al Tour que ha corrido dos veces y ha llamado la atención por su combatividad -el año pasado fue tercero en la etapa de Bagneres de Luchón, la primera de los Pirineos-. Su talento no ha pasado desapercibido y su dorsal es uno de los más seguidos del pelotón vasco por otros equipos. Además, suma puntos, la medida que valora ahora a los ciclistas, después de un buen arranque de temporada en el Tour Down Under y la París-Niza que ha compartido con su hermano Jon, el último ciclista vasco que ha logrado un triunfo en el World Tour -una etapa del Giro del año pasado- y que aún tiene un año más de contrato con Euskaltel-Euskadi. "A los dos nos gusta y nos motiva correr juntos", reflexiona el pequeño de los Izagirre, otro diamante, "pero nunca se puede asegurar nada".
Por su parte, hoy arranca la Vuelta a Castilla y León y el sábado se disputa la Amstel Gold Race, la primera de las clásicas de las Ardenas.