Mutxamel (Alicante). Euskaltel inicia la temporada centrado en lo deportivo después de atar dos años más de contrato, hasta finales de 2012, con sus patrocinadores principales. ¿Es un alivio?
Lo es que nuestros patrocinadores estén tan comprometidos en este proyecto como nosotros mismos. Aunque no han subido el presupuesto mantienen firme su apuesta por este equipo.
Patxi Mutiloa, director de Deportes del Gobierno vasco, hablaba recientemente de lo problemático que puede resultar en el futuro la dependencia institucional del deporte profesional vasco, incluido el equipo Euskaltel-Euskadi.
El dinero institucional está también muy presente en la pelota, en el fútbol… Todos los deportes dependen de las instituciones porque las fórmulas de recaudación son escasas.
¿Euskaltel-Euskadi subsistiría sin financiación pública?
Es que ese es el secreto de este equipo. Ser Euskadi, llevar su nombre, nos hace diferentes a cualquier otro proyecto. Parecía que Euskaltel-Euskadi era el proyecto de un pensamiento político y ahora ha llegado al Gobierno vasco otro partido y se sigue apostando por él. Este equipo ha sabido unir a un país entero sin distinción de ideologías. Es su gran mérito. Al equipo Euskadi tiene seguidores de ideas políticas diferentes. Creo que por eso está tan enraizado en la sociedad vasca que es difícil pensar en su desaparición. Euskaltel-Euskadi es tan singular que si se tratasen de imitarlo y sacarlo en otro sitio no lo conseguirían. No hay nada en el mundo que se parezca a esto.
Está el Andalucía, el Xacobeo…
Son intentos infructuosos de sacar un proyecto como este. También en Bretaña trataron de hacer algo similar. Le pidieron a Miguel (Madariaga) los estatutos, le preguntaron cómo lo había sacado adelante, pero nada. Euskaltel-Euskadi no se puede imitar.
También están Astana, Katusha, el equipo de Luxemburgo…
Pero esos son grandes países con muchos recursos económicos. Euskaltel es el único equipo que lleva el nombre de su comunidad. Lo que más me apena es que muchos solo se darán cuenta de lo que significa este equipo cuando desaparezca, si es que algún día lo hace.
Habla usted como si el equipo fuese eterno e invulnerable.
Miguel siempre dice que no tiene fecha de caducidad. Yo no lo sé, pero estoy acostumbrado a ver que todo tiene un final.
