La cuenta de Instagram @injectorsnow, especializada en estética y tendencias de cirugía, ha publicado un video que muestra cómo lucen hoy algunas de las celebrities más famosas del mundo y cómo se verían si nunca se hubieran sometido a operaciones estéticas, según una recreación hecha con inteligencia artificial.
El resultado ha generado un gran impacto en Instagram y TikTok, ya que aparecen figuras como Kylie Jenner, Kim Kardashian o Hailey Bieber, cuyos rostros han cambiado notablemente a lo largo de los años, siempre bajo la lupa mediática. En el clip se pueden ver imágenes actuales contrastadas con versiones “naturales” en las que, de acuerdo con la IA, se intuyen las facciones que podrían haber mantenido sin intervenciones estéticas.
El contraste es llamativo: en las imágenes generadas se aprecia un envejecimiento mucho más evidente, con arrugas marcadas alrededor de los ojos y la boca, piel con menos tersura y volúmenes faciales más planos. La IA elimina los efectos de rellenos, bótox o cirugías, y devuelve un aspecto más acorde con la edad biológica que tendrían sin intervenciones.
Cómo trabaja la inteligencia artificial en estos casos
El proceso no consiste en recuperar fotos antiguas, sino en utilizar modelos de inteligencia artificial entrenados con bases de datos de rostros reales. Estos sistemas analizan cómo envejecen de forma natural las facciones de una persona según su estructura ósea, la textura de la piel y la genética estimada.
Primero se parte de la imagen actual de la celebridad. Luego, la IA “borra” de manera simulada los indicios de retoques estéticos, como labios aumentados, pómulos marcados o piel demasiado lisa, para generar una versión más verosímil de cómo luciría esa persona sin tratamientos. El resultado no es una fotografía real, sino una recreación hipotética.
Una tendencia al alza
En las últimas décadas, las operaciones estéticas han pasado de ser un tema tabú a convertirse en una práctica generalizada. Los datos internacionales hablan claro: en 2023 se realizaron cerca de 35 millones de intervenciones estéticas quirúrgicas y 19 millones no quirúrgicas, lo que refleja un crecimiento del 3,4 % anual y del 41 % en los últimos cuatro años.
Estados Unidos lidera en volumen total, con más de 6 millones de procedimientos anuales, seguido de cerca por Brasil con alrededor de 3 millones. Sin embargo, cuando se analiza en proporción a la población, es Corea del Sur quien encabeza la lista mundial. Allí se estima que 1 de cada 25 personas se ha sometido a una cirugía plástica y que más del 30 % de mujeres de entre 19 y 29 años han pasado por una intervención estética.
En América Latina, países como Argentina, Brasil, Colombia y México destacan también entre los más activos en este tipo de procedimientos, situándose entre los primeros puestos a nivel global. Esta tendencia refleja tanto la influencia cultural como el acceso creciente a clínicas especializadas.
Además, los tipos de intervenciones más solicitadas han cambiado con el tiempo. La liposucción ha superado al aumento de senos como la cirugía más realizada en el mundo, y las operaciones faciales ganan terreno de forma acelerada. En particular, la blefaroplastia (cirugía de párpados) superó los dos millones de intervenciones en 2023, impulsada por la exposición constante a selfies, videollamadas y redes sociales.
A la par, los tratamientos no quirúrgicos han experimentado un auge imparable. El más popular es el uso de ácido hialurónico, aplicado en labios, pómulos o arrugas para dar volumen y rejuvenecer el rostro. En 2023 se registraron más de 5 millones de procedimientos con ácido hialurónico en todo el mundo, consolidándose como el retoque estético más demandado. Su éxito radica en que es un tratamiento mínimamente invasivo, con resultados inmediatos y cada vez más accesible en clínicas de todo el mundo.
En definitiva, la cirugía estética ha dejado de ser un lujo reservado a unos pocos y se ha convertido en un fenómeno global, marcado por la normalización social, la influencia de la cultura pop y unos estándares de belleza cada vez más homogeneizados.