Las peticiones de matrimonio en recintos deportivos se han visto ya muchas veces. Generalmente suelen correr a cargo de aficionados, que aprovechan el escenario para vivir ese momento tan especial, pero también las protagonizan deportistas. Lo que no es tan habitual es que un futbolista pida matrimonio a su novia durante un partido de fútbol.

Ha ocurrido en un encuentro de la segunda división bielorrusa, que enfrentaba este sábado al Smorgon y al Volna. En el minuto 85 del partido, el jugador local Vladislav Shubovich marcó de penalti el definitivo 2-0 y aprovechó para acercarse a la banda y arrodillarse ante su novia, que se acercó hasta ahí.

Todo parecía muy bonito, pero un miembro de seguridad creyó que la novia era una espectadora que intentaba saltar al césped con el partido sin concluir y le propinó un fuerte empujón, separándola de su novio y rompiendo el emotivo momento. Eso provocó un fuerte enfado en Shubovich, que parecía que iba agredir a ese hombre, aunque finalmente sólo le recriminó lo que acababa de hacer, al igual que sus compañeros.

Por suerte para la pareja, segundos después el jugador del Smorgon pudo volver a arrodillarse y entregarle el anillo, así como un ramo de flores entre los aplausos de sus compañeros de equipo y mientras el árbitro contaba los segundos perdidos para añadirlos al final del tiempo reglamentario.