Hace apenas unos años, desde 2018 si no me equivoco, la RAE aceptó entre las suyas (entre las palabras, quiero decir...) el término sororidad que, en sus dos primeras acepciones, recogen las ideas de 1.f. Amistad o afecto entre mujeres y 2. f. Relación de solidaridad entre las mujeres, especialmente en la lucha por su empoderamiento. Les cuento todo esto porque La Real Sociedad Bascongada de los Amigos del País (RSBAP), institución decana en el ámbito de la cultura del País Vasco con 260 años de existencia, desarrolla los días 4, 11, 18 y 25 de febrero las V Jornadas Las mujeres en Bizkaia sobre el tema Itinerarios de Progreso y Sororidad. En su organización colabora activamente la historiadora Begoña Cava, todo celebrado en el salón de actos de las Juntas Generales de Bizkaia, donde su presidenta, Ana Otadui, fue la encargada de los tributos de bienvenida.

Permítanme que se lo explique con algo más de desarrollo. El valor de la sororidad (latín, soror, sororis) se entiende como la relación de solidaridad y hermandad entre las mujeres en la búsqueda de su empoderamiento con un itinerario que propicie la alianza, el respeto y el reconocimiento además de la igualdad para la mujer en la sociedad vizcaina. Explicado queda. Al menos según las capacidades de quien esto escribe. Queda ahora entrar en materia. Vayamos.

El programa de mano que se repartía estaba impreso en un color otoñal, ocre, con una lluvia de hojas de roble y la escultura de Dora Salazar titulada Tentempié, estilizada y hermosa. Y antes de que caiga en el olvido el detalle, les recuerdo que un coro se acercó al salón de actos con la tradición a cuestas: los cantos de Santa Águeda. Supongo que a la mártir también se le considera patrona de las mujeres porque la condenaron a cercenarle los pechos.

En fin, les diré que la primera de las cuatro mesas redondas programadas se celebró ayer bajo el título Diálogos compartidos, habilidades profesionales y contribuciones, fue presentada por la propia Begoña Cava y contó con la presencia del vicepresidente de la comisión de Bizkaia de la RSBAP, José Manuel Barandiaran, y con las intervenciones de Maite Aranzabal Harreguy, presidenta de Fundación Novia Salcedo; María Goti, directora gerente de un medio de comunicación impreso en Araba; Ana Belén Palencia, directora de Comunicación del BEC; y Patricia Sojo, directora y fundadora de Bilbao House Concerts. Todas ellas intercambiaron pulseras de Santa Águeda.

Sus palabras tenían el atractivo de una piedra imán. Y a la cita acudieron, entre otros, Javier Aramendia, delegado de la RSBAP en Madrid, Estibaliz Apellaniz, Inés Pellón, profesora de la UPV/EHU y amiga de número de la RSBAP y coordinadora de la próxima mesa redonda que versará sobre las Normas de convivencia: mujeres juristas en Bizkaia que tendrá como ponentes a Adela Asua, catedrática Emérita de Derecho Penal (UPV/EHU); a Reyes Goenaga, presidenta de la Audiencia Provincial de Bizkaia; y a Maite Portus Saratxo, abogada, especialista en Derecho de Familia; la concejala Eider Inunciaga; junteros como Raquel Goñi y Xabier Arrieta; Vicente Reyes, recién ingresado en las RSBAP, María José y Carmen Rosas; el neumólogo Valentín Achutegui, Pepa Sáenz de Buruaga, María Jesús Cava, Cristina Mendia; el médico humanista Ricardo Franco Vicario, Marcelino Gorbeña, Miguel Ángel Santos; Mari Carmen y María Jesús Laibarra, Begoña Martín, Esther Martín, Xusane de Miguel, Izaskun Llona, quien recordó la Asamblea de Mujeres que se celebrará el 7 de marzo; Libe Zalbidea, María del Pilar Gómez; la cónsul belga, Sylvie Lagneaux, María Pilar López, Carmen Aizcorreta, Nuria Barandiaran, María Jesús Alonso y un buen número de personas que fueron testigos de una mesa redonda donde todo cuadró.