SCUCHEMOS al discípulo de Ken Loach, el cineasta Louis-Julien Petit, director de Las invisibles, en sus notas sobre la película. "En agosto de 2014, Claire Lajeunie (quien dirigió el documental sobre mujeres sin hogar Mujeres invisibles, sobreviviendo en la calle, para Francia 5) me dio el libro Sur La route desinvisibles que había escrito para complementar su película. Se remonta a sus encuentros, sorpresas, interrogatorios y a su relación con estas mujeres. El libro me sorprendió: estaba muy lejos del tono realista, sociológico y serio que esperaba del tema. Todo lo contrario: me encontré inmerso en un cuento sobre seres muy humanos, con todos los ingredientes de una tragicomedia. Las mujeres en este libro eran increíblemente complejas, conmovedoras y, a menudo, divertidas, a pesar de sus realidades dramáticas". Así nace la película sobre la que orbita la historia que hoy vengo a contarles.

La película, fechada en 2018, habla de los sintecho y las mujeres en dificultades, de las trabajadoras sociales de un centro, l'Envol, un refugio diurno para mujeres sin hogar en la frontera franco belga que está a punto de cerrar, mientras ellas hacen lo posible y lo imposible para reintegrar a quienes cuidan en la sociedad. Vista esta cruda realidad, es lógico entender, a la hora de proyectar esta película, que Cine Club FAS, institución que dirige Txaro Landa, organizase ayer una sesión apoyándose en colaboración con Economistas sin Fronteras, con la coordinadora en su delegación vasca, Laura Ruiz, presente ayer en el Salón El Carmen; el Colegio Vasco de Economistas y Emakumeak Babel.

Antes de seguir, detengámonos en una curiosidad. Creo que fue Bob Dylan quien dijo aquello de que "si no tuviera dinero, podría ir de un lado a otro siendo invisible. Pero actualmente me cuesta dinero ser invisible. Es la única razón por la que necesito dinero". Como ven, la invisibilidad se mueve por grados y lo mismo para unos es un deseo que para otros muchos un castigo humano. Puestos a escoger una de las cualidades de ese don, me quedo con la que detectó Miguel de Cervantes, quien aseguraba que el amor es invisible y entra y sale por donde quiere sin que nadie le pida cuenta de sus hechos. Lo que anhelamos muchos, vamos.

Perdón por el guiño. Digamos, como mandan los cánones de la crónica, que la proyección se redondeó con la celebración del X Cine Foro, que contó con la presencia de Sonia Gorbeña, embajadora de Bizitegi, y Greta Frankenfeld, voz cantante del Fondo de Mujeres Calala. Más allá de que la película muestra una realidad dura y trata un tema bien representado, con un punto de humor y un tono cuasi-documental, con un magnífico reparto en el que se mezclan actrices profesionales con otras que no lo son, elegidas entre mujeres que han pasado por experiencias de marginación social; las voces de Sonia y Greta fueron claras. Muy claras.

Testigo de todo cuanto les cuento fueron Jorge Barrio, Fernando Prieto, Moussa Goudiaby, atento a llevar el control en la entrada al salón; Yolanda del Nozal, Begoña Vázquez, Txarli Otalora, cicerone habitual para los visitantes del FAS, Toni Garzón, Dori Encinas, acompañada por José Benito Encinas, Maite Murguia, Anuska Ortega, Ruth Ochoa, Camino Martínez, Pedro Arrizabalaga, Rosa María Hernández, Elena Saralegi, Susana Fernández, Maite Onandia, Miren Sánchez, Karmele Herranz, Josuka Díaz, Javier Alonso, Cristina Olabarriaa, Beñat Lazaro, el médico Roberto Lertxundi, Ander Idigoras, Begoña Rey, José María Martínez, Elena Urizar, Miren Odriozola, Fernando Izquierdo, María Luisa Godoy, Gonzalo Lekunberri, Marije Urrutia, Olatz Basaldua, Ane Garay y un buen puñado de gente sensible que se acercó al encuentro con el arte puesto al servicio de la solidaridad y la vida compartida.

Cine Club FAS proyecta 'Las invisibles' junto al Colegio Vasco de Economistas, Economistas Sin Fronteras y Emakumeak Babel

El X Cine Foro contó con la presencia de Greta Frankenfed, del Fondo de Mujeres Calala, y Sonia Gorbeña, de Bizitegi