Mungia fue ayer jueves el escenario de los Laboral Kutxa DEIA Hemendik Sariak de Mungialdea. Olalde Aretoa acogió la gala en la que, sobre todo, hubo agradecimiento, emoción y ganas de celebrar, de celebrar el buen hacer de tantas y tantas personas, entidades, empresas y asociaciones que merecen un reconocimiento como el de ayer jueves. Como siempre, en la gala se galardonó a quienes mejoran sus pueblos, a quienes hacen avanzar a su comarca, a quienes ayudan al de al lado... en definitiva, se aplaudieron esas historias que emocionan, y se puso en valor ese trabajo, muchas veces casi invisible, que llevan a cabo. Ya antes de comenzar la gala se respiraba ilusión, el buen ambiente reinaba a la entrada.

Dentro, Alain Salterain, encargado de dirigir la gala dio la bienvenida a los presentes, antes de que el alcalde de Mungia, Ager Izagirre, subiera al escenario. El primer edil recalcó que estaba "feliz de estar nuevamente en Mungia celebrando esta gala". Recordó que la anterior fue menos numerosa y, "aunque con cuidado, vamos saliendo de la situación y da gusto ver Olalde Aretoa de esta manera". Puso en valor los Hemendik Sariak, porque "es un acto de felicidad, necesitamos ejemplos como los que hoy se premian, hacéis un trabajo importantísimo sin esperar nada a cambio, pero hoy sois protagonistas y de manera muy merecida", les dijo a las y los premiados.

Acto seguido, el director de Desarrollo de DEIA, Kike Hermosilla, también insistió en lo positivo de estar ayer jueves por la tarde en un municipio como Mungia. Hermosilla quiso resaltar la importancia que tiene para DEIA la información local, siendo "escaparate y altavoz" para dar a conocer todo lo que hacen las personas y asociaciones en los pueblos, para contar todas esas historias que merecen ser contadas. Recalcó también la importancia de Mungialdea para DEIA, donde además "siempre nos han tratado de maravilla". Quiso compartir con los presentes el proceso tan importante que está llevando a cabo DEIA hacia la digitalización, con un proyecto de hiperlocalismo que pretende "potenciar esa información local".

Los primeros en recibir un premio fueron Jesús Luis Ateka, Urko Gorriño y Ángel Clemente, de Otazua Passivahaus y Bioconstrucción, empresa de Arrieta y que es todo un referente en la fabricación en madera y la rehabilitación de caseríos para que sean eficientes, la construcción pasiva. Alain Salterain anunció a la segunda premiada, y sin que hubiera subido al escenario ya arrancó un gran aplauso. Y es que Teresa López Mitxelena, médica recién jubilada, que ha trabajado los últimos 13 años en Laukiz, ha dejado una gran huella en la comarca, y la gente se lo agradeció mostrándole así su cariño.

Y si la anterior premiada arrancó uno de los aplausos más fuertes de la tarde, las trabajadoras de Emaús Fundación Social de Gamiz-Fika Pilar García, Iraia Uria y el antiguo usuario Juan Ruiz, regalaron el momento más emotivo, recordando el paso de Ruiz por la fundación. Imposible contener la emoción y más de una lágrima en los ojos de las personas que escucharon con esperanza la historia de Juan y todo el trabajo que realizan en la fundación. Y de la emoción a las sonrisas. Se premió al club Gatikako Iusturi Patinaje Kluba, que recibió el galardón con una representación de diez chicas y chicos del club, que ya es un referente a nivel de Bizkaia y ha cosechado grandes logros, como el de su equipo senior femenino que milita en la liga OK Plata. Con los nervios a flor de piel, los más txikis arrancaron las risas de todos.

De ser feliz sabe un rato el siguiente premiado, Pablo Brogueras, reconocido por su labor altruista en Fruiz, donde hace de todo, literalmente. Ayuda a organizar actividades, en citas deportivas y hasta en la iglesia. Y por si fuera poco ¡ayer jueves casi vende a los presentes alubias de su huerta! Fue uno de los momentos divertidos de la gala -aunque hubo muchos- y su don de gentes llegó hasta el punto de que Alain Salterain le propuso presentar junto a él la gala del año que viene. Tampoco se quedó corto Iván Font, que subió al escenario con Maitane Azpillaga. Ambos han dado vida a Rapaces Maruri, donde crían rapaces y animales con fines educativos y han formado un aula de la vida. Font explicó parte del trabajo que realizan, y le puso tanta pasión que si le dejan alargarse un poco más, estas páginas no hubieran podido publicarse hoy. Pero sin duda, el modo en el que se explicaron daba ganas de conocer su trabajo y quedarse allí escuchando.

Dan vidilla a Laukiz y están donde tienen que estar para "hacer pueblo", por eso también subieron al escenario integrantes de la comisión de fiestas de Laukiz, que explicaron que su siguiente cita será en San Martín y que ya están preparando el PIN navideño, todo un ejemplo de ese trabajo que a veces pasa desapercibido pero sin el que muchos pueblos no tendrían actividad. Y cerraron la gala los dos premios a Interampas y Munegane Kultur Elkartea de Mungia, quienes en colaboración, y con el deporte como nexo común, trabajan por la educación integral de las niñas y niños y hacen todo lo posible para que ningún txiki se quede sin practicar el deporte que le guste. El broche de oro fue la foto de familia.