Amurrio - Mientras enseña y explica con detalle el contenido de la exposición no puede evitar recordar los años de su infancia que "pasé aprendiendo a pintar y dibujar en los cursillos que se imparten aquí al lado, en la kultur etxea". Después estudió Bellas Artes donde se licenció en la especialidad de Diseño Gráfico y en muy poco tiempo "me contrataron en un estudio de Vitoria-Gasteiz en el que hacían muchos trabajos de ilustración para artículos, folletos o aplicaciones multimedia". Allí comprobaron que la amurrioarra Yolanda Mosquera "tenía facilidad para esta faceta artística y me encargaban este tipo de creaciones". Fue su labor durante dos décadas hasta que en 2008 decidió abrirse nuevos caminos en su profesión. "Me di cuenta de que el diseño gráfico no era lo mío, no era lo que más me motivaba y me matriculé en un postgrado de Ilustración Infantil en Enia, Escuela de Diseño y Arte en Barcelona". Sin duda, fue un punto de inflexión en la trayectoria de Mosquera ya que "descubrí un mundo maravilloso de experimentación" a pesar de que "hay mucha complejidad en estos trabajos que unen el diseño y el arte con la literatura", reconoce.

A medida que avanzaba en el postgrado, la amurrioarra tenía cada vez más claro que "me quería dedicar a ilustrar". Así lleva ya haciéndolo desde hace una década, un periodo creativamente muy fructífero que, además, ha venido acompañado de importantes reconocimientos como el Premio Euskadi de Literatura en la modalidad de Ilustración de 2018 por su trabajo en La pequeña Roque, la anterior Mención de Honor de los Emiratos Árabes en la Feria del Libro Infantil celebrada en Sharjah o su elección para participar en la Muestra Internacional Ilustrarte en Portugal y en diferentes muestras de ilustración en China, Corea e Italia.

Arte y Oficio Sus creaciones recalan ahora en Amurrio con una exposición que repasa toda su carreta y que se puede ver y visitar hasta el 15 de febrero en La Casona bajo el título de Ilustración: Arte y Oficio. La muestra incluye 19 proyectos de Yolanda Mosquera y alrededor de 70 ilustraciones. Dividida en cinco grandes bloques temáticos, supone un recorrido "por las diferentes áreas que abarca la ilustración como la editorial, la publicitaria y la de producto, acabando con una serie de trabajos personales donde se puede ver mi evolución estilística a lo largo de estos años y la variedad de técnicas que utilizo en mis imágenes", explica.

La artista plantea la muestra como "una forma de enseñar algunos de los soportes donde he podido desarrollar mi creatividad, entendiendo la ilustración como una forma de comunicar" y espera que sirva para "no solo para dar a conocer mi trabajo en mi municipio natal, Amurrio, sino toda la labor que realizamos los que nos dedicamos a esta disciplina".

La exposición incluye piezas muy destacadas de la artista amurrioarra como el cartel promocional de la Vuelta al País Vasco Itzulia 2019 donde el protagonista es la imagen mitológica de Sugaar para "reivindicar nuestra cultura más ancestral junto a nuestro deporte" y con el que quiso "visualizar el pelotón como una serpiente de colores que se desliza por nuestro territorio". También se puede ver el encargo realizado por Fournier para conmemorar el 150 aniversario de la baraja de cartas, un trabajo para el que fue seleccionada junto a otras tres ilustradoras. "A mí me tocó diseñar los bastos, un elemento normalmente con una carga simbólica violenta y que yo quise contraponer con la inocencia y el juego del mundo infantil de una forma irónica". De hecho, son Pippi Langstrum y sus amigos quienes inspiran los llamativos personajes del palo.

En la muestra se pueden ver también trabajos personales donde Yolanda Mosquera puede dar rienda suelta a la imaginación y experimentar con diferentes materiales y técnicas como el collage "que es, ahora mismo, la que más me gusta y con la que más disfruto".