Aparte del frío, la lluvia y el granizo que acompañó buena parte del desarrollo de la prueba del Campeonato de Txakurkros de Muskiz el gran protagonista de la prueba celebrada ayer domingo en tierra minera fue el portugalujo Iñigo Zárate, quien con su braco de Weimar, de nombre Isker y seis años de edad, logró el cajón más alto del podio de la cita al igual que hiciera hace una semana en la prueba disputada en Trapagaran. Allí hizo el mejor tiempo con 31 minutos y 33 segundos sobre una distancia de 7,71 kilómetros mientras que ayer domingo paró el crono con un meritorio tiempo de 33 minutos y 48 segundos con un recorrido de 8 kilómetros y un desnivel de más de 300 metros. “Esta prueba tenía más longitud y más desnivel que la de Trapagaran. Menos mal que Isker es el que corre de los dos porque la prueba me ha parecido más durilla con mucha subida en la que había que apretar aunque en la bajada se podía correr más que en la otra prueba”, señalaba Iñigo Zárate, miembro del club Amarok. El ganador destacó que con el frío que hacía “hasta los perros tenían ganas de llegar a meta. La prueba ha sido exigente”.

Corredor habitual de trail, Iñigo Zárate lleva mas de 4 años corriendo con Isker, un perro atlético “que se subía por las paredes en casa en cuanto llevaba un par de días sin poder salir. Yo empecé a correr por él llevándole por el monte para cansarle y luego descubrí este deporte y así empezamos. Yo corro txakurkros a consecuencia del perro”, apunta. El atleta humano confiesa no seguir de cerca el resultado clasificatorio de la liga vasca a pesar de haber ganado dos de las tres pruebas celebradas este año. “De hecho no participaré en la próxima prueba que se celebrará en Etxebarri y aún no he decidido si los haré en Galdakao. El txakurkros no me lo tomo como una competición sino como un deporte en el que disfruto con mi perro”.

En auge

En la prueba oficial de ayer domingo participaron un total de 98 corredores y corredoras mientras que hubo 11 inscritos en la txakurkros popular de 4 kilómetros. La prueba oficial transcurrió entre las inmediaciones de la Ikastola de Muskiz y las faldas del Monte Mello, incluyendo en el trazado final el tránsito por la Glorieta de Las Acacias, y sirvió para dejar constancia del buen nivel del que goza este deporte de invierno y la pugna entre varios corredores y corredoras. Así, en el caso de los hombres, el segundo clasificado fue Marcos Santiago (Amarok) que llegó a 23 segundos del ganador y que también logró el mismo puesto en Trapagaran aunque a un minuto y 8 segundos del vencedor.

En el caso de las féminas, se dio la circunstancia de que hubo una alternancia en los dos primeros puestos respecto a la prueba trapagarandarra. Allí venció Sandra Jiménez, de Amarok, con un crono de 40’ 04” frente a los 41’ 30” invertidos por la independiente Oihane Agirre que ayer domuingo paró el cronómetro en 43’ y 03’’ segundos aventajando en un minuto y 36 segundos a Jiménez.

Los participantes consultados por DEIA destacaron el gran nivel de la organización de la prueba que incluso habilitó junto al patio cubierto de la Ikastola un par de grifos con manguera para que los corredores pudieran liberar a sus mascotas del barro acumulado en la prueba. “Y eso que hemos cruzado un río con agua hasta la rodilla pero con este tiempo el terreno era un barrizal. Es lo que toca”, expresó un corredor.