Desde que en octubre de 1992 las Juntas Generales de Bizkaia aprobaron la desanexión de Zierbena del Ayuntamiento de Abanto y Ciérvana, el pequeño enclave costero emprendió un proceloso camino plagado de dificultades pero también de esperanza por labrarse un futuro como municipio independiente. Un reto a superar con sus propios medios y recursos y con sus singulares señas de identidad ligadas al sector primario y especialmente a la mar. Casi 30 años después, Zierbena ha logrado gracias a su intensa relación con el crecimiento del Puerto de Bilbao y su zona industrial situarse como uno de los municipios vascos con mayor renta per capita lo que se ha traducido en un destacado desarrollo de infraestructuras sociales, culturales o deportivas de las que disfrutan sus poco más de 1.500 habitantes.

Dentro de este caminar independiente una de las estrategias que han defendido los sucesivos equipos de gobierno municipal ha sido la difusión de las principales señas de identidad de su paisaje y paisanaje tanto para el afianzamiento social de su pasado como imagen de marca para las miles de personas que anualmente recalan en este municipio de apenas 10,5 kilómetros cuadrados.

En ese cometido, el pasado miércoles Zierbena dio un nuevo paso con la inauguración del conjunto escultórico Itsasondo en el barrio de La Arena en el que aparecen una pareja con un niño que se dirigen a la playa por el paseo que une la ermita de San Ignacio con el arenal de referencia para Ezkerraldea, Meatzaldea y Enkarterri. Obra del pintor y escultor bermeotarra, Eneko Zubia, la figura intenta ser un compendio del valor que tiene la playa como lugar de ocio y de disfrute de la mar.

"Tal como reza la placa que acompaña la escultura, amar es una cosa viva en la que unos juegan con la ola y andan sobre la ola, disfrutan del mar", señalaba el artista de Bermeo que resultó ganador del concurso que a tal efecto puso en marcha el Ayuntamiento de Zierbena en 2018. "Es un conjunto que además de integrarse en el espacio de la playa y la mar, tal como se planteaba en el concurso, me ha permitido romper una lanza en favor de la igualdad ya que es la madre y no el padre la que lleva la tabla de surf mientras que el hombre porta en sus hombros al niño que lleva un velero. Tuve dudas de si la criatura tenía que ser niño o niña pero al final me decidí por el niño que ve como su madre, como cualquier otra mujer, es capaz de hacer algo -en este caso surf-", explica este pintor para quien no era desconocido el municipio zierbanato.

"Enrike ya conocía Zierbena porque fue quien restauró el mural que nuestro pintor local Marcelino Bañales había realizado en la ermita de San Ignacio", recordaba el alcalde de la localidad costera, Iñigo Ortuzar, quien recordó que este insigne pintor cuenta desde 2011 con su propia estatua junto a la Kultur Etxea del barrio de La Cuesta.

"Desde que se instaló la estatua de Enrike Zubia el pasado miércoles estamos viendo como mucha gente se acerca a su pedestal para hacerse fotos. Incluso un día apareció una piedra pintada entre la cabeza del padre y la pierna del niño que al parecer forma parte de un juego que se ha puesto muy de moda en Internet", apuntaba el regidor quien enmarcó esta nueva estatua de la playa de La Arena en la estrategia iniciada en 2007 con la creación de la figura de la pareja de arrantzales.

"Zierbena, por tradición es un pueblo marinero por lo que parecía lógico que fuera el homenaje a los arrantzales el punto de arranque aunque no podemos olvidar que entre nuestros barrios hay también agricultura y ganadería", esbozó Ortuzar quien develó que la intención inicial para ubicar esta estatua era la rotonda situada en el aparcamiento principal de la zona de Zierbena. "Lo planteamos por el tránsito de personas pero finalmente decimos incorporarla como elemento destacado en la remodelación que estamos acometiendo en la zona de la ermita donde se hizo una pérgola cubierta y se ha instalado un bote marinero", destacó.

ARTE COMO SIGNO DE IDIOSINCRASIA

OTRAS ESCULTURAS

Arrantzales. La escultura Itsasoaren oroimenez, fundida en bronce por el azkoitiarra Xebas Larrañaga en homenaje a las gentes de la mar preside el puerto de Zierbena desde 2007. La escultura supone el reconocimiento a la ardua labor de los hombres y mujeres de los pueblos costeros.

Bañales. Zierbena homenajeó en mayo de 2011 al artista del barrio de Kardeo, Marcelino Bañales, con una estatua ubicada junto a la kultur etxea del barrio de La Cuesta. La obra, del escultor Joaquín Alcalde se inauguró en el 20 aniversario del fallecimiento del pintor, escultor y poeta zierbanato nacido en 1942.

'Itsasondo'. El pintor y escultor bermeotarra Enrike Zubia es el autor del conjunto escultórico Itsasondo situado junto al acceso a la playa de La Arena desde la Ermita de San Ignacio. La obra pretende además romper una lanza en favor de la igualdad.