A pesar de que el recuerdo de los seres queridos no sabe de fechas, no cabe duda de que el día de Todos los Santos goza de una arraigada tradición para hacer patente esa nostalgia. Ello lleva a cientos de personas a acercarse ese día a los camposantos como el de La Arboleda. Un ritual que este año está mediatizado por la pandemia del covid-19 y sus estrictas medidas de movilidad y aforo que el Ayuntamiento de Trapagaran vigilará con tres auxiliares en las puertas de acceso y en el interior. Unas normas condensadas en un bando en el que señala que el horario de apertura del cementerio, hoy, mañana y el 1 de noviembre será de 10 de la mañana a 8 de la tarde.

Además se significa que el máximo permitido para aparcar en la zona del camposanto será de 50 vehículos y “se recomienda una estancia máxima de 15 minutos”. Según destacó la concejala de Seguridad, Iratxe Etxezarraga, “son medidas de sentido común para mantener el aforo permitido y la distancias sociales requeridas en este espacio público”.