Sestao - Los escaparates son la carta de presentación de los comercios. Por ello, el ser creativos y originales a la hora de dar forma a los escaparates es un valor al alza en un mercado más competitivo y en el que diferenciarse de la competencia es un aspecto fundamental. Ayer, Sestao aplaudió a los mejores diseños del municipio en la gala de entrega del XXII Concurso de Escaparatismo de Sestao, unos galardones que organiza la Asociación de Comerciantes de Sestao y que se entregaron en la Escuela de Música de la localidad. Acompañando a los miembros de la Asociación de Comerciantes de Sestao estuvieron el alcalde de Sestao, Josu Bergara; el director de Comercio del departamento de Turismo, Comercio y Consumo del Gobierno vasco, Juan Andrades; el presidente de Cecobi, Pedro Campo y el presidente de Ezkerraldenda -y miembro de la asociación comercial sestaoarra- Fernando Miravalles.

El escaparate de Errauskiñe ha llamado mucho la atención de los sestaoarras en las últimas semanas y no solo ha gustado a la ciudadanía, sino también al jurado del certamen puesto que este comercio de moda infantil recibió ayer el primer premio del concurso de escaparates Sestaoko Betidanik. El alcalde de Sestao, Josu Bergara y la presidenta de la Asociación de Comerciantes, Zulema Blanco, hicieron entrega del premio a Mari Carmen Díez. La moda es un mundo de imaginación y creación y eso se traslada también a los escaparates. Así se reflejó en el primer premio en la categoría de decoración interior y también en el segundo premio, ya que éste fue a parar a Begoña Moda. Por último, el tercer premio fue para la pastelería Gran Vía. Desde la organización también se quiso reconocer la labor de los comerciantes y hosteleros de más allá de su trabajo a la hora de confeccionar sus escaparates. Por ello, se entregó el galardón a mejor decoración navideña que fue para La Barrita de Pan, mientras que para el Bar Perfil fue el galardón que reconoce a este local como el establecimiento con mejor decoración interior.

La asociación comercial sestaoarra también aprovechó los premios del Concurso de Escaparatismo para dar su merecido reconocimiento a la Floristería Rossas. Rosa Mari Millán alzó la persiana del negocio en 1976 en el barrio de El Carmen y allí se inició una trayectoria de más de cuatro décadas y en la que han tomado parte dos generaciones, ya que Amaya e Itziar, sus hijas, se han sumado a este negocio que, a lo largo de estos 44 años, ha cambiado de ubicación en diversas ocasiones hasta asentarse en el número 1 de la Vía Galindo, donde está actualmente.

sestaoko betidanik En la velada de ayer también se entregó el premio Sestaoko Betidanik, galardón que cumple su séptima edición y que, en esta ocasión, sirvió para reconocer la labor y el apoyo de Carlos Pueyo al comercio sestaoarra. Pueyo lleva más de 20 años colaborando, implicándose en las acciones que lleva a cabo la Asociación de Comerciantes de Sestao, entidad que ayer le mostró con este premio su más profundo agradecimiento.