La Mancomunidad de Durangaldea ha impulsado un principio de acuerdo entre el Departamento de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno vasco y Maristak Ikastetxea, para posibilitar la recuperación de la parcela de la antigua Fundifes en el barrio durangarra de Tabira, con el objetivo de convertirlo en un polo formativo y de promoción económica de la comarca en el marco de la estrategia Basque Green Deal.

El proyecto propone un modelo de colaboración público-privada en el que el Gobierno vasco a través de Sprilur asumirá la compra y descontaminación de la parcela para recuperar estos suelos y destinarlos a las necesidades de formación profesional y superior de Durangaldea, así como a futuras posibilidades de promoción económica sostenible y a la generación de empleos asociados a la economía verde, las energías renovables o la movilidad sostenible, en especial la vinculada a la bicicleta.

Una parte importante del terreno se pondría a disposición de Maristak Ikastetxea para poder desarrollar su proyecto de Nuevo Maristak,Nuevo Maristak con lo que se daría un impulso definitivo a la formación profesional vinculada a las necesidades de las empresas, con un nuevo centro, más grande en el que poder incorporar nuevas familias profesionales, ciclos superiores y especialidades vinculadas a la ciberseguridad, la eficiencia energética y el transporte y la movilidad sostenible. La Consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno vasco, Arantxa Tapia, se reunió ayer miércoles con la presidenta de la Mancomunidad de Durangaldea, Mireia Elkoroiribe, y el director de Maristak Durango Ikastetxea, Daniel Irazola. En la reunión, Tapia agradeció la actitud colaborativa de la Mancomunidad y el centro formativo por liderar la recuperación y desarrollo comarcal. “Nos encontramos en una época de recuperación económica en la que tenemos que asumir iniciativas transformadoras aprovechando todas las oportunidades que surjan en clave de formación y de empleo industrial. Los indicadores económicos apuntan en la buena dirección, pero todas las comarcas se tienen que poner las pilas para no perder ninguna oportunidad. En esta ocasión, se demuestra que la colaboración institucional es un activo que impactará positivamente en el conjunto de los y las vecinos de Durangaldea, y desde el Gobierno vasco seguimos abiertos a esta fórmula de trabajo allá donde haga falta”.

Por otro lado, Elkoroiribe defendió que “este solar supone un impulso importante a la formación profesional y superior y una magnífica oportunidad para la creación de un ecosistema de formación y promoción económica en Durangaldea. Todo ello se traduciría en una mayor generación de empleo y en un aumento de las cotas de bienestar para los vecinos de Durango y de Durangaldea, que es siempre nuestro objetivo final”.

Desde Maristak, su director Dani Irazola se mostró muy satisfecho ya que “en el año 2016, tras 112 años en la misma ubicación, iniciamos un proceso de reflexión que nos permitiera adecuar los espacios a los nuevos escenarios educativos y a los nuevos retos del Duranguesado. Tras cinco años donde hemos valorado diferentes alternativas, hemos decidido que por dimensiones, ubicación y disponibilidad el entorno que antiguamente albergaba la fundición Fundifes es el más adecuado para un nuevo MKD-Maristak Durango. Ahora esto es posible, gracias en gran medida al apoyo y acompañamiento recibido por parte de la Mancomunidad de Durangaldea, que ha facilitado la fórmula de actuación a través de la mediación con el Departamento de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente”.

Al encuentro de ayer miércoles asistieron también Txaber Ouro, director gerente de Sprilur; Alfonso Fernández, Administrador de la Provincia Ibérica de Hermanos Maristas e Iñaki Totorikaguena, presidente de la comisión de Desarrollo Económico de la Mancomunidad.