Las firmas de lujo buscan afianzar su posición en la capital vizcaina en locales situados más cerca de la milla de oro. Es el caso de la firma Carolina Herrera que, después de dos décadas ha decidido dejar su actual emplazamiento en el número 46 de la Gran Vía, para ocupar otra plaza más grande, sita en esta ocasión en la misma arteria, pero más cerca de la Plaza Elíptica de Bilbao.

El local de dos plantas, situado en Don Diego López de Haro, esquina con Iparraguirre se convertirá en los próximos meses en la tienda principal de la firma de lujo en la villa. Con este movimiento la firma no solo renueva el local, sino que con este cambio, pretende ganar una mayor presencia en la villa que ha visto desaparecer otras grandes marcas: “Es un local que por su situación está, sin duda, mejor ubicado. Además, para esta firma de lujo el cambio de emplazamiento le va a dar mayor presencia en la capital vizcaina. Es una esquina, con un importante escaparate en el que la firma podrá brillar aún más que en la actual ubicación”, aseguran fuentes del sector comercial.

Con este cambio de ubicación, la marca CH toma el relevo a la firma dedicada a la importación de alfombras artesanas, Isfahán, que aterrizó en la villa en el año 2020 y tan solo duró abierto cuatro meses en ese mismo emplazamiento. De hecho, de la firma de alfombras solo queda el rótulo en el arco de la puerta de acceso al local.

Su fugaz paso por la capital vizcaina dejó libre el año pasado un local muy codiciado, que en las últimas décadas ha pasado por distintas manos. El establecimiento, en cuya cristalera cuelga ahora el cartel de Local alquilado, será sometido a una reforma para adaptar las dos plantas con las que cuenta -sótano y primera- a las necesidades de la firma. Será a partir de ese momento cuando el rojo intenso, marca corporativa de la diseñadora venezolana, definirá ese espacio.Después de un año en alquiler este local vuelve a tener inquilino y por si fuera poco una firma de lujo con la que volverá a llenarse de glamour tras las marchas de otras firmas como Louis Vuitton o la italiana Twin-Set. Esta última tomó el relevo de la francesa Vuitton, la marca más rentable del mundo del lujo, con la intención de seducir a una clientela con el estilo sobrio que ha dado prestigio a su fundadora, Simona Barbieri, desde 1990. Pero tampoco funcionó, la baja rentanbilidad del negocio y el coste del alquiler le llevó al cierre cuatro años después, pero sin embargo, sigue manteniendo abierta la tienda de Donostia.

Alquileres

Con el tiempo, este codiciado local de Gran Vía con Iparraguirre, se ha transformado en una esquina maldita para quienes se decantaron por ubicarse en él. El local ha acogido durante décadas una empresa de artes gráficas, varias marcas de lujo de moda, así como un restaurante de comida rápida.

Concretamente, según fuentes consultadas por DEIA, fue la segunda cadena de hamburguesas del mundo, Burger King, quien más rentabilidad llegó a sacarle durante su estancia en ese local, con un alquiler que por entonces rondaba alrededor de los 8.000 euros. Pero fue la llegada de la marca de lujo francesa, Louis Vuitton con la que las rentas se duplicaron hasta alcanzar los 17.000 euros al mes. Sin embargo, la crisis económica, unida al cambio en el consumo, llevó a la firma francesa a tomar la decisión de abandonar la plaza de Bilbao, a pesar de que la villa estaba entre sus urbes preferidas, junto a capitales como Barcelona o Madrid como estrategia de imagen.