Oihane Pardo impregnó de su bagaje arquitectónico a la firma Amarenak, que tiene en el diseño de los kaikus su seña de identidad.

Una donostiarra diseñando el look Bilbao.

—Nosotras entendíamos que desde fuera vemos una ciudad moderna, cosmopolita, que se identifica mucho con el color rojo y que sin embargo, la gente de Bilbao tiene un punto de vista diferente, ese pasado industrial, más gris, vinculado al cemento, se identifica más con el color azul Bilbao, y han visto que lo que más iconico de la villa es la baldosa que surgió a principios del XX, que es el icono más representativo de la ciudad. Con estas dos ideas cogimos prendas que teníamos en la colección e hicimos un vestido azul y blanco y cambiamos esa cenefa artesanal con una plancha, con el dibujo de la baldosa de Bilbao. Además, como es un vestido que es reversible lo que hicimos fue hacer en positivo y en negativo. Cada uno puede elegir con qué versión se queda, con la positiva o la negativa.

¿Hay diferencias entre Bilbao y Donostia a la hora de vestir?

—Quizá Bilbao es más de extremos y hay mucha diferencia entre barrios y zonas y alguna vez los de Donostia decimos que los de Bilbao son mucho más cosmopolitas a la hora de vestir y aquí quizá seguimos siendo más clásicos.

Los diseños de Amarenak están basados en los kaikus.

—Amarenak surgió de casualidad, yo provengo del mundo de la arquitectura. En el momento en el que terminé mis estudios me tocó trabajar en el extranjero y yo tenía una antigua chaqueta kaiku de mi amona que se la dio a mi ama y ella a mí. De ahí viene el nombre de Amarenak. Utilizaba ese kaiku como si fuera mi abrigo favorito y la gente me preguntaba en eventos internacionales y les contaba de dónde venía la prenda. Había jubilado mi kaiku y en una visita a casa aproveché para comprarme otro pero cuando vine pero los kaikus que podía comprar ya no tenían nada que ver. Se habían convertido más en un disfraz que en una prenda de vestir. Decidí copiar el de mi amona.

¿Hay diferencias entre la arquitectura y la moda?

—Se entiende una parte sin la otra pero tampoco hay tanta diferencia. Creo que tengo una forma de abordar la moda que tiene que ver con la arquitectura, más a nivel empresarial, de cómo abordo los proyectos. En arquitectura nos enseñan a hacer las ideas realidad. En la moda haces lo mismo. Cojo historia, valores, conceptos que me parecen imporantes y los intentos materializar a través de las prendas, que cumplen su función de vestir y de estética.

¿Este 2020 cómo está siendo?

—Muy complicado para el mundo de la moda pero soy de la opinión de que el mundo de la moda estaba mal de antes. Cuando empecé a entrar en el mundo de la moda vi cosas que eran incoherentes, como producir colecciones cada tres semanas.

¿En qué proceso está Amarenak?

—Desde el principio optó por hacer las cosas bien, un poco diferentes. Intentamos producir bajo pedido, colecciones pequeñas y atemporales, prendas que no desaparecen mientras tengamos stock.

“Los kaikus se habían convertido en un disfraz más que en una prenda de vestir”

“En arquitectura nos enseñan a hacer las ideas realidad. En la moda haces lo mismo”