LOS bares de cereales son la última moda que se extiende por las grandes ciudades y no deja de ganar adeptos. Los hipsters, milenials, foodies y demás modernos descubren el placer de degustar cientos de tipos de cereales diferentes, algunos imposibles de encontrar aquí, aderezados con toda clase de toppings. Hace ya dos años que Bilbao cuenta con un establecimiento de este tipo rompiendo moldes y cambiando los clásicos pintxos por la cuchara y el bol. Sin embargo el próximo viernes, las tres universitarias que impulsaron Let’s Cereal, Marina Areizaga, Iratxe Alkiza y Silvia Echeverría, ponen fin a esta etapa y el local se reinventa manteniendo su esencia. Según explica Areizaga, este bar para cereal lovers “empezó casi como una experiencia piloto de seis meses pero el proyecto fue creciendo”. Hasta independizarse porque esta tendencia de tomar cereales para desayunar, merendar e incluso cenar reúne adictos entre todas las generaciones. Curiosas, creativas y hambrientas de nuevas experiencias, sus impulsoras echan la persiana el próximo día 10 con una fiesta de despedida porque quieren emprender otras aventuras y “centrarnos en un futuro profesional diferente”, asegura Echeverría.

Pero la capital vizcaina no se queda huérfana de leche de colores, batidos y boles de cereales, acompañados de sabrosos siropes y toppings como filipinos, M&M’s, marshmallows o galletitas y Janire Chaparro recoge el testigo.

“La idea surgió porque nos fuimos de viaje a San Francisco y nos quedamos flipadas con todas aquellas cajas de cereales de colores. Empezamos a probarlos y a comerlos en los desayunos y, cuando volvimos, nos trajimos bastantes pero enseguida se acabaron. Así que quisimos comprobar cómo era aquí su acogida y qué aceptación tenían”, resume Iratxe Alkiza. De esta forma hace dos años nacía en Bilbao el primer bar de cereales de Euskadi. “Como concepto también fuimos de las primeras de España porque la idea no estaba tan explotada como ahora”, matiza Echevarría. “El objetivo era crear un espacio para los más jóvenes con juegos de mesa, en un entorno recreativo y sano”, precisa.

A partir de ahora, Janire Chaparro seguirá ofertando los cereales más populares, los Froot Loops, esos aritos de colores que son conocidos internacionalmente y han salido en infinidad de series y películas. O los Lucky Charms, los Chips Ahoy, y también los Reesse’s Puffs con crema de cacahuete y productos tan extravagantes como unos que saben a tostadas de carnaval o a canela. Porque Chaparro -que ya regenta Tuinkis, una tienda en el Casco Viejo con sabores genuinamente americanos- es fan de estos iconos yanquis. Janire se hará cargo a partir de mediados de junio de este paraíso de los cereales.

“La idea es mantener la misma línea dándole una vuelta de tuerca para abarcar un mayor segmento de público y que, por ejemplo, los aitas puedan venir con los niños a tomarse algo. Tenemos intención de hacer tostadas con mantequilla de cacahuete, tortitas americanas, helados exclusivos... Pretendemos organizar noches temáticas con juegos de rol, con e-sports... Y dentro de la línea de cereales que ellas han creado, darle mi imagen de marca de Tuinkis, vender refrescos de sabores, chocolatinas y nuestro universo de productos más demandados”.