Bilbao - El estudio informativo de la futura estación ferroviaria no se olvida del tranvía como otro transporte que potenciará su carácter intermodal. Los planos del informe diseñan por dónde transcurrirá en el tramo de la calle Hurtado de Amézaga que corre paralelo a la nueva estación el cierre del anillo tranviario que conectará la actual parada de La Casilla con la plaza Circular.

Como se observa en el croquis superior, los técnicos han optado por la alternativa de pegar las vías del tranvía a las aceras que flanquean la calzada. Así, por la derecha, en dirección a la plaza Circular, transitarán las unidades que lleguen desde la plaza Zabalburu y por la izquierda, las que efectúen el recorrido contrario.

Este itinerario, totalmente distinto, por ejemplo, al de la calle Autonomía que se construyó en medio de la calzada, viene obligado por las futuras entradas y salidas diseñadas para el estacionamiento de vehículos y el futuro intercambiador de autobuses, las cuales también se habilitarán en este tramo.

La idea es ubicar estos accesos en el centro mismo de la arteria urbana en un escenario similar al que hoy utilizan los conductores que estacionan su vehículo en el aparcamiento subterráneo de El Arenal.

Lo que ocurre es que en Hurtado de Amézaga serán cuatro hendiduras diferentes, cada una de un solo carril, para permitir las entradas y salidas, por un lado, de los autobuses del intercambiador y, por otro, de los turismos que estacionen en el aparcamiento. Por todo ello, fuentes del Ayuntamiento indicaron que el cierre del anillo tranviario no se desarrollará hasta que concluyan las obras de la estación del TAV. - A. G. A.