El calor no ha disuadido a los miles de asistentes al Jaialdi 2025 que, con paciencia y entusiasmo, hacen fila durante más de una hora para conseguir el codiciado merchandising oficial del evento. La escena tiene lugar en el exterior del Idaho Arena, donde un puesto de venta ha sido instalado para atender la alta demanda de productos conmemorativos.
Camisetas, gorras, calcetines y otros artículos con el logo de Jaialdi 25 se están vendiendo a ritmo constante, en lo que se ha convertido en uno de los puntos más concurridos del recinto. La expectación es comprensible: el festival regresa diez años después de su última edición, y para muchos, llevarse un recuerdo es una forma de celebrar ese esperado reencuentro con la cultura vasca.
A pesar de las temperaturas elevadas, las colas avanzan con buen ánimo y sin incidentes. El ambiente que se respira es de fiesta, reencuentro y orgullo compartido por una identidad que trasciende fronteras.