Uno de los grandes del selecto grupo de alpinistas pioneros vascos que dejó huella, a pesar de morir escalando muy joven en el espolón N de Anboto, a 972 metros de altitud. Que yo sepa sólo ha escrito de él César Estornés, en su blog, siendo de recibo agradecer el trabajo de recuerdo y honra a muchos de sus compañeros del CDB tan olvidados y desconocidos. También hay dos citas en Internet de los clubes de montaña Tabira (Durango) y Vetusta (Oviedo). Nada más. Está será la cuarta. La caída del escalador y su fatal desenlace fue hacia el lado de Arrazola, un desfallecimiento, parece ser por vértigo, que le produjo la tapia, y se avalanzó al vacío, botó peña en peña hasta caer a plomo en Zabaleta.

Escribí aquí hace tiempo que una beca universitaria, gubernamental, de las Diputaciones o de cualquier Ayuntamiento, podría ser la solución para llegar a una cumbre más alta en esto de la historiografía alpina vasca. ¿No os parece que se lo merecen?

Emaldi era un as de la escalada en su origen en Euzkadi. También era tenor. Veamos la ficha resumida que he trabajado en espera de que con esta página sea un poquito más conocido Ángel. Nace en Bilbao en 1910 y fallece el 5 de junio de 1944, con tan solo 33 años, la edad de Cristo crucificado y la altura de la primigenia cruz de Gorbeia. Estando escalando Frailia en Anboto, en cordada con Alberto Barrena y Ramón Leoz, ambos del Tabira de Durango. No iban encordados. Después le dedicaron una vía e instalaron una placa los del Grupo Astarloa del Athletic Club de Bilbao el 23 de julio de 1944.

Emaldi era directivo del Athletic Club de Bilbao en 1934, componente de la junta directiva del Bilbao Alpino Club en 1942, presidiendo el Grupo de Alta Montaña del BAC al año siguiente. Participa en la primera tentativa para coronar Atxa Adarra en Itzina, Orozko, un pináculo al que tenían ganas de llegar a su cumbre los pocos escaladores que había en aquella época. Fue el 14 de abril de 1934. Ese año holló el Pico del Fraile. Dos meses después el Pico del Ahorcado donde recoge estampas de la Virgen, dejadas por el montañero Yhon. En 1944 le tenemos como integrante del famoso grupo Saltamontes, también componente del Peña Gorbea. La ascensión al Ahorcado con Díaz Basaldua es la cuarta, 10 años antes Echevarrieta hizo la tercera y Sopeña y Garaticelaya, en 1928, fueron los primeros.

El 18 de junio de 1944 la prensa se hace eco de su fallecimiento. Tanto el diario HIERRO como EL CORREO publican su ausencia. Estos rotativos de Bilbao contaron su muerte y le dedicaron muchas alabanzas.

Su aita, de Larrabetzu, era zapatero, su ama natural de Lekeitio. Toda la familia estaba implicada en el comunismo vasco y así se constata en la guerra civil cómo le vemos en diversos batallones socialistas a sus familiares directos. Fijaros en la importancia de sus cumbres en una época en la que sólo los desplazamientos eran una odisea y multiplicaba por 10 el tiempo que hoy dedicamos a una salida para hacer cima.

Termino confesando que ando hace tiempo con otro artículo de recuerdo de Díaz Basaldua, compañero de cordada de este gran escalador que hoy homenajeamos y que tan joven murió en Anboto. De Yohn también. A ver si tengo suerte localizando más datos de ambos, tengo pocos, y así publico sus vidas en la montaña y la escalada en origen, aquí.

El Grupo Alpino Mendirantz era al que pertenecía Ángel Emaldi, se inició en esta asociación de Juventud Católica de San Francisco, pasando luego al BAC, donde con entusiasmo y verdadero cariño ocupó puestos importantes, siendo por sus conocimientos uno de sus más firmes puntales del alpinismo vasco de principios del siglo pasado.

En esos años, muchos de esos clubes desaparecieron y otros se fusionaron. Veamos algunos ejemplos; Cultural Deportiva Obrera de Bilbao, Grupo Sabindarrak de Deusto, Deportivo de Solocoeche, Euzkadea Azkatuta, Deportiva Arenal, Grupo Meabe, Club Barraincúa o Deportiva Achuri-Beti.

Lo que le dio fama fueron sus escaladas, recordemos cuales fueron las más importantes: Pico del Fraile, Ahorcado, Gurena y Adarra, Alluiz y Amboto, en los Picos de Europa Llambrión, Cerredo, Tiro Tirso, Llago, Madejuno, Picón y las Torres Santa de Castilla y Enol. También visitó en sus últimos años Pirineos, el Soum de Ramond, Monte Perdido y el Cilindro de Marboré.