El brillo y la luz de la Epifanía llegan a 50 representaciones en Arrigorriaga

Encuentro de participantes en el 50 aniversario de 2019. S.M.

En esa charla-coloquio, el economista, abogado y escritor natural del municipio, aunque afincado desde hace años en Lanzarote, explicará “cómo y por qué se creó” una Epifanía de la que fue uno de los principales impulsores y promotores. Y su origen está relacionado con las fiestas patronales de Arrigorriaga del 22 de julio de 1968. “La dictadura franquista estaba muy fuerte, pero también muy preocupada por los acontecimientos de ese año especialmente en Francia y la cadena de revueltas estudiantiles y sindicales conocidas como el Mayo francés”, contextualiza Astarloa que, por entonces, tenía 20 años. “Aquí nos llegaba un airecillo y, justo entonces, en Arrigorriaga cambiaron al Jefe Local del Movimiento, que quiso organizar unas Magdalenas oficiales”. Esa imposición no fue bien recibida por el colectivo de jóvenes del pueblo “y a mí se me ocurrió promover, para ese 22 de julio, una especie de fiestas paralelas en las que el acto central era una suerte de cabalgata sobre del 68”. En ese desfile apareció la figura de Massiel, y sus dos cantantes, que habían ganado Eurovisión y, entre otras cosas, también se hizo referencia al lanzamiento de una misión espacial no tripulada del programa Apolo. “Salió muy bien y todo el pueblo quedó encantado”. Y la satisfacción entre los promotores fue tal que Astarloa no dudo en decir: “¡Vamos a hacer algo más! Vamos a organizar una Epifanía!”, rememora.

Prohibición inicial

Organizadores de la primera Epifanía de 1969. A. A.

No fue fácil. En un principio, y con gran parte del montaje ya preparado, “el Ayuntamiento prohibió la representación”. Armando Astarloa, por entonces estudiante universitario en la Facultad de Económicas, explicó la iniciativa a José Antonio Zarzalejos, uno de sus profesores y delegado provincial del Ministerio de Información y Turismo de Vizcaya. “Firmó el permiso, aunque el guión de la representación tuvo que pasar antes por la censura”. Y, finalmente, la primera representación de la Epifanía de Arrigorriaga tuvo lugar el 5 de enero de 1969 con la participación de más de 150 vecinos del pueblo entre figurantes, ayudantes y colaboradores y bajo un guión escrito por el propio armando Astarloa y dividido en seis actos principales: El nacimiento del Niño Dios, visita de los Reyes Magos al Rey Herodes, la Anunciación del Ángel a los pastores, la adoración de los Magos, la matanza de los inocentes y la huida a Egipto.

Ese texto, versión Vulgata del Evangelio, representa “la luz que nace, es decir, la Epifanía, y que lleva implícito el principio de igualdad entre hombres y mujeres, niños y mayores, blancos y negros; el principio de solidaridad, porque cada uno entrega lo que buenamente tiene; y el principio de la libertad de Aristóteles que con la matanza de Herodes y la huida a Egipto decimos que cuando la ley es injusta, no hay que cumplirla”.

Esos son los conceptos que quiere recordar, destacar y enfatizar Armando Astarloa en la conferencia del 4 de enero, además de poner en valor un montaje hecho por y para el pueblo, y así ha llegado hasta la actualidad. “Debemos transmitir ese mensaje a las nuevas generaciones”, afirma Astarloa que no puede evitar emocionarse por la conmemoración de las 50 representaciones. “Nadie pensó que iba a durar tanto. Solo puedo dar las gracias al pueblo, me siento muy contento”.