En el pleno de política general de Bizkaia que se celebra este miércoles, la diputad general, Elixabete Etxanobe, se ha referido también a uno de los proyectos que la Diputación tiene en cartera, la ampliación del Guggenheim en Urdaibai. A este respecto, ha advertido de que la protección del entorno natural y la generación de riqueza en la zona serán las "líneas rojas" de la actuación de la Diputación. "El proyecto solo seguirá adelante si supone una mejor del medio ambiente y genera nuevas oportunidades de futuro para los habitantes de Busturialdea", ha subrayado. En este sentido, ha remarcado el derribo de la antigua fábrica Dalia y la descontaminación de los acuíferos de Gernika. "Teníamos un gran problema medioambiental y estamos empezando a aplicarle soluciones", ha alabado.
La diputada general ha reconocido que se trata de una iniciativa que requiere "escuchar y tener en cuenta las preocupaciones de la ciudadanía" para definir "el mejor proyecto para Urdaibai y Busturialdea".
El Guggenheim Urdaibai estará "al servicio de la ciudadanía y del país", ofreciendo "nuevas oportunidades de desarollo económico a una comarca que necesita un impulso decidido" y con el respeto al medio ambiente como premisa principal. De hecho, ha defendido que será un museo que, a través del arte, "profundice en la concienciación sobre la conservación de los espacios naturales", todo ello en un espacio "adecuado a las características del territorio".
Y es que esas son las "líneas rojas" que la institución foral se ha marcado: la protección del medio natural y de la generación de riqueza en la zona. "No haremos nada que perjudique la vida de Burturialdea", se ha comprometido.
SALA REKALDE
En el ámbito cultural, Etxanobe también ha avanzado que el próximo año abrirán sus puertas la nueva Sala Rekalde, "un espacio renovado donde tendrán un protagonismo especial los artistas locales"; la amplicación del Museo de Bellas Artes de Bilbao, "necesaria" para poner en valor la colección y el programa de actividades, y el Museo Vasco, a finales de 2025 con 6.400 metros cuadrados "de puerta de entrada de la cultura vasca al mundo y del mundo a la cultura vasca".
Y es que, ha subrayado, "la cultura debe tener un papel principal en la configuración del futuro de Bizkaia", entendiéndola como "vías para conectarnos con el mundo y para dar a conocer y reforzar nuestra identidad propia".