Una marea azul, el color de las camisetas de este año, se internó ayer en el pulmón verde de la villa. La novena edición de la marcha de la mujer llegó hasta la finca recientemente adquirida por el Ayuntamiento a los herederos del arquitecto y político Félix de la Torre (1867-1911) para su transformación en un proyecto para el que el equipo de gobierno quiere contar con la participación ciudadana. La casa construida en 1908 y el terreno de 42,7 hectáreas que la rodean forman parte del recuerdo de generaciones de balmasedanos y balmasedanas que han crecido jugando en sus inmediaciones. Seguramente por ello las fundadoras eligieron el nombre de Zoko Maitea para la asociación de mujeres que en 1992 daba sus primeros pasos.

Empezaron “de la mano del grupo Etxekoandre de Bilbao” en su ánimo de cimentar un programa de actividades en el espacio público, al margen del ámbito doméstico. El entonces alcalde, Jesús Suso, “nos concedió un local” y bajo el mandato de Joseba Zorrilla “se inauguró la Casa de la Mujer de la calle Correría”, que cumple su vigésimo aniversario, rememoró Conchi de Pradales. Charlas, cursos, formación... Numerosas propuestas en torno al empoderamiento femenino se han afianzado en Balmaseda en estas dos décadas.

Más asociaciones han seguido la estela de Zoko Maitea. Clementine Baza Bola puso en marcha en 2015 Nos Unimos-Unissons Nous “después de diez años trabajando en el voluntariado”. Huyó de su Congo natal como refugiada de guerra, una experiencia que ha acrecentado su vocación de ayudar a otras personas. Agente del programa de apoyo Tartekari Sarea, formada en psicología y pedagogía y ligada a Unesco Etxea a través de proyectos de formación en desarrollo y cooperación, ha viajado a África en numerosas ocasiones. “Vi que había que hacer algo” también en Balmaseda, donde organiza “actividades formativas, charlas e iniciativas de acción social”. Actualmente, Nos Unimos-Unissons Nous aglutina “205 socios y socias”.

Protocolo contra agresiones

En el contexto de la huelga feminista del 8 de marzo de 2018 y el rechazo social a la sentencia por la violación en grupo de La Manada, inició su andadura la asociación feminista Mariorratz. Promueven “talleres de empoderamiento y autodefensa, charlas y el proyecto Udazken Feminista, con conferencias, monólogos o teatro, que está cosechando una buena acogida”. También han sido parte activa de un protocolo contra agresiones machistas en el txosnagunea en las fiestas que “nos gustaría que se extendiera a todo el municipio”, compartió Uxue Villota.

Las tres asociaciones de la villa recogieron el testigo de la marcha en este año tan significativo por el aniversario de la Casa de la Mujer, donde centralizan gran parte de sus propuestas. En los soportales del edificio consistorial tomaron el micrófono al terminar la marcha y disfrutar de txoripanes para reponer fuerzas. En ese lugar se ubicó un photocall en el que los participantes se inmortalizaron luciendo sus camisetas azules con el lema Emakumeak aurrera! Incluso las esculturas de los soldados romanos se unieron a la ocasión con globos morados.

Allí Jorge Gómez Balenziaga, de la empresa de la villa Alboan Servicios Turísticos, desveló un último dato sobre Félix de la Torre: “trajo el agua potable y por eso una calle lleva su nombre”. La que fuera su casa acusa el paso del tiempo y la falta de uso. Zoko Maitea está conectada a otro ilustre de Balmaseda: Martín de los Heros, “político, militar el historiador que heredó la finca en 1850, se retiró aquí y murió sin descendencia nueve años más tarde”. La propiedad pasó a pertenecer a “un sobrino suyo emigrado a México, cuya hija, Laura, contrajo matrimonio con Félix de la Torre”. Disfrutó muy poco del edificio y los jardines, puesto que “falleció en 1911 a los 44 años de un ataque al corazón, aunque se rumoreó que un duelo tuvo algo que ver...”. Pese a que los descendientes de su hija Laura y su marido, el pintor italiano Guido Caprotti, “ya casi no vinieron”, en Balmaseda perviven las historias sobre la finca. Como “aquellas ranas de colores procedentes de Brasil que trajeron para un estanque y se congelaron con la primera helada que cayó”.

Ruta

Ilustres de la villa. Jorge Gómez Balenziaga recordó que Zoko Maitea perteneció a Martín de los Heros y por herencia la recibió Laura Hernández Acuña, esposa de Félix de la Torre.

Movimiento feminista. De vuelta en la plaza de San Severino, representantes de Zoko Maitea, Nos Unimos-Unnisons Nous y Mariorratz hablaron de sus actividades.

Hectáreas

42,7

La finca Zoko Maitea, adquirida por el Ayuntamiento de Balmaseda hace pocos meses, abarca 42,7 hectáreas. El equipo de gobierno quiere promover un proceso participativo para decidir su futuro uso.