El socio más antiguo del club de montaña de la ciudad vizcaina se llama Jesús Guaresti Guaresti, Txutxin. Cuando fundaron el club de montaña de Orduña él era vocal de la primera junta directiva. Su hermano Txetxu, vicepresidente. Otro vocal que también vive es Sabino Pinedo Vitoria (su aita fue teniente de gudaris). Secretario fundacional, Francisco Ortega Larrieta, y, presidente, José Antonio Oteo García. Firmaron la primera acta el 8 de diciembre de 1964. Este año celebran su 60 cumpleaños.

Con el primero de ellos quedé en el Txoko Kantarranas, y pena que Sabino no pudo venir por problemas de movilidad. Fue el 12 de diciembre de 2023. Actualmente preside el club Izaskun Ugarte y el secretario es Juan Ángel Vélez. Ellos hicieron la gestión para este encuentro.

Pero remontémonos en el tiempo 40 años atrás de esta secuencia porque entonces hubo actividad que, como bien apunta el investigador Txetxu Lambarri era el esport montañero orduñés, práctica desarrollada por personas de acomodo social. El 23 de mayo del año 1927 solicitan permiso para la construcción de un refugio en el lugar de Corralejo. Algo antes surge en Orduña la tradicional romería del 25 de julio de Santiago Apóstol al Txarlazo (1923). Se llevó a cabo en la vertiente castellana del término Gardulla y lo hicieron allí los montañeros del batzoki por ser el santo el patrón de España, “entonces no puede serlo del País de los Vascos”, apuntaban textualmente. Primera etapa montañera agrupada de Orduña, la elitista, desde 1923 a 1936. La segunda, la clandestina, desde 1940 a 1963. La tercera, la que nos cuenta Txutxin, desde 1964 a 1985, y la cuarta y actual desde 1985 hasta hoy.

La vida de Txutxin, el informante de hoy, es de película. Un zapatero hecho a sí mismo en un profundo conocer que rebosa cultura y no para de ofrecerme datos durante todo el rato. Aprendió euskera él solo con el método IKA cuando pocos lo estudiaban. Habla vizcaino. Hombre ordenado se mire por donde se mire, lo apunta todo, deja registro de cualquier suceso.

En 1960 tenían ganas de agruparse de una santa vez y se reunían en el centro de Acción Católica auspiciados por el párroco Nemesio Bello Portu, oriundo de Tolosa, euskaltzale y que ofició en Orduña destinado en Santa María, entre 1962 y 1969. Un domingo, al bajar de la Sierra Salvada, se tropezaron con Nemesio y les dijo que se organizaran como club en los locales antes citados. El Ayuntamiento no les dejó un lugar y les dijo que se metieran en los locales del club de fútbol, que acaba de celebrar su centenario, por cierto. Así fue, pero se salieron pronto y fue el bar Pruden, en la calle Barria, donde siguieron juntándose.

Fueron a un pleno municipal, sin voz claro, y un concejal, Sebas Olaguenaga, que era herrero, me apunta Txutxin, les defendió. Tampoco les concedieron un sitio para reunirse.

Formalmente la primera ascensión del club fue al Txarlazo; era impepinable. La primera gran montaña, el San Lorenzo, y una de las primeras travesías fue subir a Gorbeia por Urigoiti, en Orozko. El primer buzón lo pusieron en Santiagomendi, lugar en el que existió otro puesto por los montañeros de Iberduero. Pidieron permiso e instalaron una réplica de la Virgen de la Antigua y el párroco acudió a la colocación e inauguración; era el gran cómplice del origen del club de montaña.

Me dice Jesús Guaresti que tras la apertura del 75-76 la gente se empezó a revolver yendo a partidos políticos y por eso los clubes se quedaron muy vacíos. Se unieron al Goikogane de Laudio y al Mendiko Lagunak de Amurrio y así, los tres, conseguían fletar y llenar un autobús para las salidas dominicales.

El Txarlazo Mendi Taldea goza de buena salud. Su calendario de este año tiene 21 salidas y componen el club 539 socios (331 hombres y 228 mujeres). Un total de 104 están federados hoy en día.

En lo que a historia del club se refiere, hay un extraordinario trabajo de dos tomos, no publicado, del vecino Txetxu Lambarri, buen amigo, además de todo un maestro para mí. Fechado el 14 de marzo de 2006 y titulado Recopilación de datos sobre el club de montaña Txarlazo de Orduña y el refugio de Corralejo en el monte Txolope.