A sus 31 años, Aitziber Hilera es ingeniera de diseño industrial y desarrollo del producto en la empresa guipuzcoana Bellota donde realiza tareas de mantenimiento de catálogo y desarrollo de nuevos productos.
¿Durante sus años de colegio e instituto, crees que el profesorado incentivaba las vocaciones y aptitudes científicas de las chicas igual que las de los chicos?
En mi caso sí, el profesorado nos trataba a todos por igual. Sí recuerdo unos cuadernillos con un cuestionario de preguntas que se suponía que te ayuda a orientarte para la elección de los estudios, que en mi caso no fueron nada útiles. Recuerdo como a otra chica y a mi nos salió que íbamos a ser estilistas y siendo dos perfiles técnicos ambas nos quedamos muy sorprendidas. Siempre me ha gustado mucho la peluquería, pero me llamó la atención que esa profesión sólo saliera entre las mujeres.
¿Cree que en la escuela y en casa persisten sesgos de género a la hora de que las chicas cursen estudios conducentes a trabajos feminizados, tipo salud, educación, etc?
Por supuesto. Muchas veces ni nosotros mismos nos damos cuenta de lo sugestionados que estamos. Ese tipo de conductas existen y muchas veces las personas que las ejercen no se están dando ni cuenta, por eso es importante seguir trabajando día a día en esa dirección.
Supongo que tanto en la universidad como en el trabajo estará en minoría. ¿Se ha sentido discriminada, de alguna manera, por el hecho de ser mujer?
La verdad es que en la universidad éramos 50-50% de mujeres y hombres y en el departamento de desarrollo de producto somos más mujeres que hombres. Desconozco la situación de otras empresas porque siempre he trabajado en esta, pero la verdad que cada día somos más mujeres. No me he llegado a sentir nunca discriminada, pero sí qué es cierto que cuando eres mujer y joven ves actitudes paternalistas, tipo “tu chiquita lo que tienes que hacer es…”, que esas personas no lo hacen con mala intención, pero de lo que no se dan cuenta es que esa “chiquita” igual tiene las cosas más claras que ellos y tiene conocimientos que ellos no.
¿Cree que las mujeres tienen que demostrar más que los hombres para escalar profesionalmente?
En algunos casos sí. Creo que en sectores más masculinizados al principio una está más en el punto de mira o cuestionada, y cuesta más conseguir ese respeto y confianza.
