En el transcurso de un acto de su partido en Sondika, la presidenta del Bizkai Buru Batzar del PNV, Itxaso Atutxa, advirtió de que aún quedan por cerrar varios asuntos antes de certificar el hipotético pacto entre EH Bildu y la formación jeltzale para una moción de censura en Gernika-Lumo contra el alcalde de la localidad, José María Gorroño (Guztiontzako Herria). A día de hoy “no hay nada” cerrado, insistió, para a continuación advertir que hay diversos obstáculos que habrá que superar. El principal sería el proyecto Guggenheim Urdaibai que los jeltzales confían en desarrollar en la Reserva de la Biosfera, concretamente en la villa y Murueta.

“Hay que tener en cuenta que en ese entorno –en Busturialdea–, PNV y EH Bildu tienen una situación muy especial”, afirmó la burukide. En la últimas elecciones municipales el PNV “fue primera fuerza en Mundaka y en Bermeo, y EH Bildu nos desalojó de ambas Alcaldías tejiendo unas mayorías alternativas. Eso habrá que analizarlo”, ahondó, siendo además “algo que pesa en nuestra afiliación en la zona”. Asimismo, en el caso de Gernika-Lumo, existe otro importante escollo: el Guggenheim Urdaibai, un proyecto calificado por Atutxa como importante “tanto medioambientalmente –de mejora y rehabilitación que no se ha visto en el Estado ni en Europa en los últimos años, detalló– como en cuanto a la recuperación económica” de la zona de la Reserva de la Biosfera. El del Guggenheim Urdaibai “es el proyecto que más nos distancia. Su predisposición negativa –en referencia a EH Bildu– la estamos viendo en el resto de Ayuntamientos de la zona y también en Gernika. Es difícil entender que alguien quiera colaborar en el beneficio de los gerniqueses y gerniquesas, y se oponga incluso a las tramitaciones mínimas sobre este proyecto que vayan a ser necesarias desde el Ayuntamiento”, profundizó Atutxa.

“Nosotros mostramos nuestra voluntad”, se reafirmó la presidenta del BBB del PNV, en cuanto a tender puentes al diálogo con otras formaciones políticas, reconociendo así lo contactos que ha habido hasta la fecha entre jeltzales y EH Bildu para descabalgar a Gorroño, “pero por ahora no hay nada”, recalcó. “La moción de censura es una opción posible” en la localidad foral, “pero no la única”, tal y como subrayó, para construir “una alternativa a la parálisis que está viviendo Gernika-Lumo. El PNV está dispuesto a coadyuvar en que la gobernabilidad dé estabilidad y avance para Gernika-Lumo, pero hay que ver muy bien a qué nos sometemos y qué aceptamos porque las experiencias anteriores no han sido buenas”.

Lo que Atutxa quiso dejar claro es que el pasado 17 de junio –cuando se formaron los ayuntamientos– “tomamos una decisión por el bien de la ciudadanía de Gernika-Lumo”, que fue “apoyar a Gorroño con el compromiso de que delegara la Alcaldía en alguien de su grupo. No lo cumplió y seguimos pensando como PNV que lo más importante es que el Ayuntamiento funcione, cosa que ahora no está ocurriendo porque hay una parálisis real y efectiva que se puede comprobar. Dicho eso, no hay ningún acuerdo firmado con EH Bildu”, zanjó.