Sobre la mesa del PNV planea la opción de formalizar junto a EH Bildu una moción de censura que descabalgaría al que durante 16 años ha sido alcalde de la localidad foral, José María Gorroño (Guztiontzako Herria). Movimiento en el tablero político local que, “hoy por hoy”, es la única opción “que puede garantizar la gobernabilidad” en el municipio, según apuntaron desde la coalición soberanista, y que los jeltzales se estarían planteando. Fuentes del PNV consultadas han confirmado a DEIA que, si bien se ha existido alguna reunión entre ambas formaciones, “todavía no se ha llegado a ningún acuerdo”.

Durante los últimos tiempos, EH Bildu –vencedor en las elecciones municipales de mayo– y PNV –tercera fuerza– han intensificado los contactos, que han sido “más intensos y más fructíferos, llegando a ultimar un acuerdo de gobernabilidad” con el PNV. Siempre según el partido soberanista, “hablamos de un acuerdo que debe primar los intereses de Gernika-Lumo y la ciudadanía. Debe ser un acuerdo sin más injerencias ni tutelas. Desde, por y para Gernika-Lumo. Un acuerdo que priorice los intereses de la ciudadanía”. Y que haga al que fuera candidato de EH Bildu alcalde de Gernika-Lumo. Dan el paso, inciden, “desde la responsabilidad que nos otorga ser la fuerza más votada” a través de una moción de censura para que José Ramón Bilbao Catalá, Buli, sea alcalde de Gernika-Lumo”. Y es que su objetivo es que “Gernika-Lumo avance y se abra la puerta a un nuevo ciclo político e institucional. Por eso, por responsabilidad política y porque Gernika-Lumo y las y los gernikarras nos lo merecemos, trabajaremos para poner en marcha el pueblo”, concluyó la nota pública de EH Bildu.

En todo caso, desde el bando jeltzale –sus votos son indispensables para la moción de censura–, aún no se ha tomado una decisión definitiva. Fuentes internas de la formación no esconden que existen contactos, “pero aún no hemos alcanzado ningún acuerdo concreto”. Solo el paso de los días desvelará si las reuniones fructifican.

Cabe recordar que las elecciones municipales del pasado mes de mayo arrojaron un escenario endiablado en la localidad foral, con los tres partidos –EH Bildu, Guztiontzako Herria de Gorroño y el PNV– con un pequeño margen de votos. EH Bildu y GH lograron seis ediles cada uno y el PNV, cinco. Fue José María Gorroño quien se hizo con el bastón de mando en un acuerdo sobre la bocina con los jeltzales que le hacía dar un paso atrás y dejar su puesto en manos de su hermano, el también concejal Iñaki Gorroño, en un breve periodo de tiempo.

Durante estos meses, las acusaciones cruzadas de haber roto el acuerdo han sido constantes entre Guztiontzako Herria y PNV, que tiene en su mano cerrar la etapa de Gorroño, que durante cuatro legislaturas ha llevado el bastón de mando del Ayuntamiento gernikarra aliado con EH Bildu y PNV, y que ahora, por el contrario, negocian su moción de censura. Por su parte, el alcalde apunta que tanto él como su partido “estamos muy tranquilos”, a la par que negó que “Gernika-Lumo esté paralizada”. Asimismo, tildó el movimiento como “una maniobra para quitarme y quitarnos” del poder por parte de dos partidos que “ni siquiera comparten una estrategia común” sobre el Guggenheim Urdaibai, una de cuyas dos sedes se ubicaría en la localidad foral.