El futuro de las ciudades ha de construirse con las aportaciones de todos los agentes de la sociedad y el urbanismo ha de incluir la perspectiva de las mujeres, algo que hasta hace no mucho no ocurría. La comunidad educativa no es, ni mucho menos, una excepción y, en este sentido, las alumnas del colegio Juan Ramón Jiménez han abierto un bonito camino al convertirse en las primeras estudiantes en tomar parte en las rutas organizadas por el Ayuntamiento de Barakaldo para que las barakaldarras detecten puntos que, a su juicio, son inseguros. Así las cosas, la delegación del centro estuvo encabezada por las alumnas Malak Mariam Mendil, Maider Illarri Falcón y Alazne Montiel en la ruta que se desarrolló a lo largo y ancho de Gurutzeta, pero ellas fueron tan solo una representación de todo el alumnado de cuarto, quinto y sexto de Primaria que, en el marco de la conmemoración del Día Internacional Contra la Violencia Hacia las Mujeres, han realizado un interesantísimo trabajo en el que piden mayor iluminación o más presencia policial en una treintena de espacios del municipio.
“Hemos ido preguntando a nuestras compañeras en qué lugares de Barakaldo se sienten menos seguros y, los hemos ido apuntando”, explicaron las tres alumnas.
De este modo, lugares cerrados y con menos visibilidad han sido los puntos más señalados por la comunidad educativa de Juan Ramón Jiménez. “Hay un punto en el que siempre suele haber personas bebiendo que no nos miran muy bien y, por allí, siempre paso corriendo”, señaló una de las alumnas que representó al alumnado de Juan Ramón Jiménez. Así, la petición, por ejemplo, para mejorar la seguridad de ese lugar es incrementar la presencia policial. Con todo, ayer Malak, Maider y Alazne vieron cómo las mujeres barakaldarras que son mayores que ellas también hacen ese valiosísimo ejercicio de analizar las calles de su ciudad para tratar de hacer de las mismas un espacio mucho más seguro. “Esta iniciativa ha surgido de una necesidad real de cambio. De algo que trasciende a la escuela y a lo educativo. Infantilizar a estas niñas y no darles la importancia que tienen sus testimonios lo único que nos hace es implicarlas en actividades simples como poner una mano morada en un mural. Hemos querido ir un paso más allá y tratar de generar un cambio social, que es lo que tenemos que perseguir”, indicó Itsasne Etxebarria, profesora del colegio Juan Ramón Jiménez que acompañó a las tres alumnas en esta ruta. Pero Malak, Maider y Alazne no fueron meras espectadoras en el recorrido que se realizó por Guru-tzeta, sino que ellas también tomaron la palabra y expusieron lo que cada uno de los puntos que se visitaron les sugería en materia de seguridad, mientras el personal técnico del área de Igualdad, Servicios Municipales para los Barrios, la Policía Local y el resto de mujeres barakaldarras que participaron en la ruta escuchaban con atención. “Ha sido muy interesante escucharlas. Nos otorga otra visión que es muy importante, ya que las niñas y adolescentes también disfrutan de la ciudad y sienten sus propias inseguridades. Estamos muy emocionados con el gran trabajo que han hecho y vamos analizar una a una sus propuestas para, después, trasladarles las posibles soluciones y medidas que hayamos podido encontrar para mejorar esas sensaciones de inseguridad que nos traladan”, declaró Iratxe Foces, edil de Igualdad del Consistorio fabril.
MEJORAR EL BARRIO
Con esta iniciativa adoptada por el alumnado del colegio Juan Ramón Jiménez, el objetivo que busca la comunidad educativa no es otro que actuar de forma proactiva para mejorar diferentes zonas de Gurutzeta. “Queremos mejorar diferentes zonas del barrio para que las mujeres estén más seguras cuando pasen por la noche o por el día”, explicaron Malak, Maider y Alazne. Por su parte, desde el Ayuntamiento de Barakaldo tomaron nota de las aportaciones de estas mujeres que son el futuro de la localidad. “Estamos muy emocionadas con el trabajo que han realizado desde el centro y sin duda, recogemos el guante para revisar estas zonas y poner soluciones siempre que sea posible. Estamos muy orgullosas de tener jóvenes tan comprometidas”, concluyó Foces.
