Como si de un dique de contención se tratara, el PNV consiguió poner freno al impulso de la ola de EH Bildu en Busturialdea en algunas de las localidades de la comarca. Lo hizo, especialmente, en los municipios de Busturia, Forua, Murueta, Kortezubi y Gautegiz Arteaga, siendo pueblos que se mantuvieron fieles al partido jeltzale en las recientes elecciones municipales del 28 de mayo. Por consiguiente, ayer fueron investidos como alcaldes Aitor Aretxaga, Mikel Magunazelaia, Jueln Karrion, Karmele Enbeita y Patrik Saitua. Los tres primeros continúan en sus puestos una legislatura más, mientras que Saitua se estrena tomando el puesto de Juan Félix Naberan.

Apenas había posibilidades de protagonizar cambios de última hora alguno en los municipios citados anteriormente. Y no hubo espacio para sorpresa alguna. El escenario fue idéntico en otras localidades de Busturialdea como Errigoiti –donde Frank Zubiaga dio la campanada el 28-M dando fin a sendas legislaturas lideradas por EH Bildu– o Elantxobe, donde Patxi Egurrola, de EH Bildu, mantuvo intacta su fortaleza. De la misma forma, Ereño, Morga. Arratzu o Muxika se mantienen bajo los mandos de los mismos alcaldes de la pasada legislatura, es decir, estarán personificados en Joseba Zarragoikoetxea, María Teresa Artetxe, Josu Sabin Olano y Begona Enbeita. Por su parte, la plataforma local Armendu se hizo con la makila en Ibarrangelu –en manos de Jesús Maía Ziluaga– y Sukarieta Kanala Bizirik lo hizo con Jaime Orueta en Sukarrieta.