Bermeo fue ayer el punto de partida para la Alianza de Ciudades Mundiales del Atún que reúne a un total de siete localidades diseminadas por el globo que basan su economía y su forma de vida en base a la captura o transformación de este especie marina. La villa marinera, junto a Manta (Ecuador), Port Victoria (Seychelles), Pago Pago (Samoa Americana), Concarneau (Francia), Majuro (Islas Marshall) y General Santos (Filipinas) se ha integrado en la nueva entidad. “Formamos una ola por la sostenibilidad de la actividad pesquera”, aseguró el alcalde bermeotarra, Aritz Abaroa, quién no dudó en tildar de “histórica” la jornada.

Aurresku de bienvenida a los regidores de las siete ciudades. I. FRADUA

Cada una de las ciudades participantes acudió al evento, celebrado en el Ayuntamiento de la localidad. La firma del acuerdo puso el broche de oro al Bermeo Tuna Forum, que ha resultado un punto de encuentro del sector. A las siete ciudades les une una “vinculación comercial o histórica con el atún y comparten el objetivo de contribuir a su gestión sostenible” en toda su cadena de valor, desde las capturas en alta mar a su transformación y comercialización. “El atún es primordial en nuestras economías, diría que incluso en los procesos sociales de sus ciudadanos”, aseveró Abaroa, quién también puso en valor que “con la firma de hoy –por ayer– ponemos las bases de las colaboraciones futuras entre estas ciudades. Es tan solo el principio de un cuerdo colaboración que confiamos sea prospero”.

No en vano, el sector atunero está presente en 90 países, en los que genera innumerables empleos. Pero, sobre todo, aspiran a que el sector evolucione hacia posiciones más sostenibles. “Queremos seguir pescando, pero evitando un impacto negativo tanto en los ecosistemas como en el medio ambiente, pero también en la salud de las personas que trabajan en la cadena de valor”, agregó.

No en vano, la pesca del atún genera numerosos beneficios para cada una de las siete ciudades firmantes. Así, y en el caso de Bermeo, la flota de la villa realiza el 10% de todas las capturas mundiales, siendo punta de lanza de un sector que en esta localidad genera más de 6.000 empleos directos e indirectos, tanto desde el ámbito extractivo como en sus numerosas empresas conserveras. En el caso de la ecuatoriana ciudad de Manta, situada en el Pacífico Oriental, “sus empresas procesan cerca de 500.000 de atún al año”; mientras que en Seychelles es eje de la especie en el Índico, y cuenta con “una de las fábricas de enlatado más grandes del mundo”. Destacables también son el ejemplo de Pago Pago, en Samoa Americana, donde se centralizan las descargas del pescado del Pacífico Sur o el de Concarneau, en Francia, “primer puerto francés si hablamos del atún y que cuenta con un puerto con 200 barcos de pesca y una potente construcción naval. “Sois todos ejemplos de buen hacer y queremos que lo sigáis siendo en un futuro”, manifestaron.

El acuerdo resuelto ayer viene a impulsar la sostenibilidad en el sector mundial del atún. Y es que a juicio de Bermeo Tuna World Capital (BTWC), entidad organizadora de Bermeo Tuna Forum, “cada año se capturan ilegalmente en todo el mundo entre 11 y 26 millones de toneladas de pescado, lo que provoca pérdidas anuales para la economía mundial de entre 8,9 y 20,8 millones de euros”. De hecho, en días precedentes también se ha firmado un de Declaración Internacional por la Sostenibilidad del Atún, mediante el que se han establecido las bases para “abordar la sostenibilidad del atún de manera integral, reconociendo las características ambientales, sociales, económicas y culturales de las pesquerías y las personas involucradas en su gestión y explotación”. Asimismo, y para garantizar el futuro de un recurso que va menguando poco a poco, resultaría indispensables adoptar distintas medidas, como “mejorar los sistemas de gobernanza con medidas eficientes de control y auditoría que afiancen la práctica de una política de pesca sostenible” o “proteger y preservar el medio marino y sus recursos vivos contra la contaminación y la degradación ambiental”.

Más ciudades

En cuanto al futuro que le aguarda a la entidad de nueva creación, Ignacio Serrats (BTWC) manifestó que se trabajará para la incorporación a la red e otras ciudades importantes como Bangkok (Tailandia), Abijan (Costa de Marfil) o Azores (Portugal). “Son ciudades que quieren estar en la Alianza y trataremos de que se incorporen”, ahondó un Serrats que animó “a seguir dando pasos para ello”.