“Apenas nos queda algún fin de semana en octubre y noviembre pero tenemos el calendario de 2023 al completo por lo que estamos teniendo que decir a mucha gente que ya no hay plazas disponibles”, señala Aimar Martínez. El responsable del albergue de Cotorrio en Abanto Zierbena estima que en este año 2022 habrán pasado más de 1.000 personas, solo en fines de semana “ya que los hemos tenido todos ocupados y los grupos deben ser de un mínimo de 20 personas a las que habría que sumar los colectivos de la zona y que acuden a entre semana para diversas celebraciones”, apunta Martínez, quien destaca que el fin de la pandemia y la mejora del servicio que supuso la renovación integral del albergue realizada en 2019 son los factores que pueden explicar el auge de este recurso turístico que gestiona el club alpino Gallarreta desde 1984.

“El boca a boca es muy importante para nosotros y de hecho, salvo en una web de albergues, no tenemos presencia en las redes sociales. Nuestra máxima es dar un buen servicio a los alberguistas tanto en el interior como facilitando actividades y eso se traduce en que los propios usuarios nos recomiendan”, remarca Martínez. No es el único factor que convierte a este albergue público de gestión privada en uno de los más visitados de Bizkaia. Su excelente ubicación hace que los usuarios puedan acercarse a conocer lugares tan interesantes como el Museo de la Minería del País Vasco, la ferrería del Pobal en Muskiz o la playa de la Arena. Las instalaciones de Cotorrio, además de su privilegiada ubicación, disponen de 42 plazas en literas para la pernoctación –con una habitación de 24 plazas y otra de 18– baños y servicios, cocina y comedores con cocina industrial, frontón interior para actividades y otras instalaciones de recreo.