Es el centro neurálgico de la localidad, donde vive el grueso de la población. Protegido por la ley al estar incluido en el inventario del patrimonio cultural vasco, actuar en los edificios o las calles del casco antiguo de Bermeo no suele ser tarea fácil. Pero, conscientes de la necesidad de actuar para revertir la situación de la zona antigua –problemas en la accesibilidad, sumados a la necesidad de que los emprendedores se hagan con los locales vacíos del área–, el Consistorio de la villa marinera se apresta a emprender la renovación de las arterias principales de la zona. Arrancará primero por la calle Nekazari, para después comenzar con la mejora de Intxausti. En conjunto, la actuación ascenderá a 284.000 euros, que servirán para “mejorar la accesibilidad –ubicando las aceras al mismo nivel que la calzada–, renovar el aspecto de las calles, facilitar las labores de limpieza de la zona y, por tanto, mejorar la calidad de vida” de los y las bermeotarras.

La mayoría de las encuestas que se elaboran a nivel municipal suelen mostrar la necesidad de actuar en el casco antiguo, que no pasa por su mejor momento. Es por ello que la administración local ha puesto en marcha un plan de choque, “un plan que deberá ser sostenido en el tiempo y que iremos acometiendo paso a paso. Estamos hablando de una zona urbana de grandes dimensiones”, afirmó el alcalde Aritz Abaroa. Las obras comenzarán en breve en las calles Nekazari e Intxausti, y se ejecutarán en dos fases entre este año y el que viene”. Así, en una primera acometida se trabajará en la calle Nekazari, en la parte alta, donde se irá sustituyendo el pavimento actual “por uno de granito y soterrando los cables”.Tras ello, “se continuará con el segundo tramo de la calle Nekazari y se renovará toda la calle Intxausti. En el caso de la calle Intxausti, el objetivo es eliminar la acera existente en toda la calle para dejarla al mismo nivel”. Para la ejecución de las citadas obras, el Ayuntamiento destinará un total de 284.129 euros, y para ello, ha recibido una subvención del departamento de Cultura y Política Lingüística del Gobierno vasco contabilizada en 185.000 euros.

La concejal de Urbanismo Idoia Platas dio más detalles acerca de la actuación. “Nos gustaría hacer todas las obras en el casco viejo de una tacada, pero es imposible. Pero, en un principio, arrancaremos en Nekazari e Intxausti. Esta segunda calle es importante para la zona, ya que es una de sus arterias principales y por la que discurre buena parte del tráfico rodado”. Asimismo, y además de sustituir las losas y reponerlas a la misma cota que las aceras, el cableado será sustituido “en los lugares que esto sea posible”, se mejorará la iluminación en alguno de los puntos e, incluso, hará falta que los arqueólogos vigilen las obras, ya que existen indicios de que durante los trabajos pueda aparecer la antigua puerta de entrada al casco antiguo en los inicios de Nekazari.

En todo caso, el plan para remozar las calles del casco antiguo de Bermeo irá para largo. “Nuestro objetivo es que en los próximos años las calles de esa zona se vayan reurbanizando progresivamente”, ahondó el alcalde. Y para ello se han ido elaborando proyectos diseñados para cada una de las calles.