Suele encabezar todas las quinielas en los concursos de reses pirenaicas. Y ayer lunes, en el transcurso de la 35 edición del certamen de la raza pirenaica de la tradicional feria del Primer Lunes de Octubre en Gernika-Lumo, el iurretarra Jon Koldo Bikandi volvió a demostrar que es todo un referente entre los ganaderos vascos. Bikandi se alzó con los galardones grandes en la localidad foral al alzarse con los premios a la mejor ganadería, la mejor hembra y el mejor macho. Un total de 114 reses de 19 ganaderías desfilaron ante un jurado –y un numeroso público–, que ensalzó la labor que realizan las cabañas de Bizkaia, Gipuzkoa y Nafarroa.

Bajo un sol de justicia, las cabezas de ganado seleccionadas previamente durante el domingo tuvieron su hueco en la pista instalada en el aparcamiento gernikarra de Santa Ana. A su lado también tuvieron su espacio una treintena de productores agrícolas y artesanos que pudieron vender sus productos de kilómetro cero –pan, pastel vasco, queso, txakolis...– directamente a los consumidores, sin la necesidad de intermediarios. Desde bien entrada la mañana, los jueces –Josu Payás y Joseba Jauregui– fueron realizando su selección en las categorías en liza.

Foto de familia de los ganaderos participantes en la feria del Primer Lunes de Octubre y las autoridades. G.U.

El ganadero iurretarra, que acumula un tremendo palmarés en Gernika-Lumo, se impuso en las categorías grandes; la de mejor ganadería, mejor hembra y mejor macho por “la homogeneidad y calidad de su producto”. Solo dejó que otros dos ganaderos lograran premios. Estos fueron a parar a Urbizu Berri de Idiazabal en el apartado al mejor producto de inseminación artificial y Leire Amundarain de Orozko, que se hizo con el galardón de mejor macho joven y quedó subcampeona en la categoría de mejor hembra.

En todo caso, la jornada ferial de este lunes sirvió para reivindicar un sector primario, y más específicamente, la actividad ganadera de la raza pirenaica, que vive constantemente sobre el alambre. La subida de los precios de los piensos y los suministros, el incremento del coste de la electricidad o la sequía se han unido a la ya complicada situación por la que pasan las cabañas vascas que, por el contrario, plantan cara al duro contexto apostando por el relevo generacional. De hecho, ayer ya se pudieron ver a algunos jóvenes que vienen pisando fuerte.

El propio Jon Koldo Bikandi, quien estuvo acompañados de su hijo, aseguró que “no hay secreto para poder llegar a obtener tantos premios”. La clave es “el trabajo constante durante todo el año”, señaló, “en la preparación de los animales que van a las ferias”. De la misma forma, hubo también tiempo para realizar un homenaje a dos históricos ganaderos guipuzcoanos como Antonio Aguirrebarrena –su mujer María José Sarasti recogió el recuerdo– y Juan Maiora.

El alcalde, José María Gorroño, junto a los ganaderos. G.U.

Y lo que dejó patente la jornada de ayer lunes fue las enormes ganas que tiene la ciudadanía de volver a disfrutar de las ferias. Y si hay citas marcadas en el calendario, esas son las de octubre en Gernika-Lumo. Y con el precedente de ayer lunes, todo hace indicar que el próximo día 31 de octubre se pueden superar todos los registros en el Último Lunes de Octubre. El Ayuntamiento gernikarra ya está trabajando en la preparación de una cita que podría ser multitudinaria.