El Departamento de Vivienda de Gobierno vasco y el Ayuntamiento de Arrankudiaga-Zollo han firmado un convenio de colaboración para la construcción de un edificio con 10 apartamentos dotacionales en una parcela de terreno situada en el barrio de Garondo. Esta promoción de vivienda, en régimen de alquiler social, constituye una modalidad residencial de pequeño tamaño destinada a colectivos determinados, como jóvenes, mayores de 65 años, o personas separadas o divorciadas, “y su principal característica es que el tiempo de estancia es temporal y se limita a un periodo máximo de 5 años”, matizó ayer el viceconsejero de Vivienda, Pedro Jauregui, que ofreció ayer datos del proyecto junto al alcalde de la localidad, Txutxi Ariznabarreta, y la vicealcaldesa, Itziar Duoandikoetxea.Los terrenos, de titularidad municipal, han sido cedidos de manera gratuita y libre de cargas al Departamento de Vivienda que, a partir de ahora, asumirá los trámites administrativos para hacer realidad esta iniciativa. “Este año se sacará a licitación la redacción del proyecto de construcción, a lo largo de 2023 se adjudicará la ejecución material de las obras que supondrán una inversión aproximada de 1 millón de euros. Si no hay contratiempos, la construcción del inmueble arrancará en 2024 y se podría entrar a vivir en 2026”, precisó Jauregui. En cuando a los beneficiarios, las personas interesadas en acceder a alguno de estos alojamientos dotacionales deberán estar inscritas en Etxebide y tendrán preferencia a la hora de la adjudicación los empadronados en Arrankudiaga-Zollo un mínimo de tres años “y en el caso de que queden pisos libres se extenderá la posibilidad a residentes en Arakaldo, Laudio, Ugao-Miraballes, Zeberio y Arrigorriaga”, indicó el primer edil.

Txutxi Ariznabarreta agradeció ayer “la buena sintonía que ha habido entre las dos administraciones” para sacar adelante estos 10 alojamientos dotacionales en una localidad con en torno a 150 jóvenes, un sector poblacional que a su juicio “tiene derecho al arraigo en su espacio social y mediante esta iniciativa se le ofrece la oportunidad de independizarse y seguir viviendo en su propio pueblo en una edad en la que, en muchos casos, aún no ha consolidado su situación laboral y su proyecto de vida”. Jauregui incidió en que “la colaboración estrecha entre ayuntamientos que disponen de suelo edificable y nuestro Departamento de Vivienda, que cuenta con recursos para construir y experiencia en la gestión del alquiler público, es el camino adecuado para favorecer el acceso a la vivienda a personas que presentan mayores dificultades para ello, en especial a la juventud”. En cuanto al tamaño de los pisos, tendrán entre 25 y 60 m2 y el alquiler se determinará en función a los ingresos. l