Todos los enlaces que permitirán entrar y salir del túnel bajo la ría se soterrarán bajo la rotonda de Artaza. En el extremo contrario, en Sestao, se aprovecharán los ramales y glorietas existentes, adaptando algunas de ellas, para conectar la infraestrutura con el eje del Balloni, la Supersur y la A-8, creando un nuevo lazo elevado para los movimientos desde esta última autopista.

La Diputación ha definido ya los accesos desde ambas márgenes al subfluvial que mantiene su fecha de puesta en funcionamiento en 2028 y cuyas obras comenzarán a principios de 2024. El diputado de Infraestructuras y Desarrollo Territorial, Imanol Pradales, ha destacado este martes que el diseño de los enlaces supone un importante hito "porque define los movimientos que harán miles de conductores cada día. Los enlaces y su funcionalidad son la base para el éxito en la utilización de esta infraestructura".

El túnel bajo la ría conectará a través de 3.037 metros las rotondas de Artaza, en Leioa, y de Ballonti, en Sestao, permitiendo crear una gran variante en el entorno metropolitano, junto a la segunda fase de la Supersur, como alternativa al puente de Rontegi. “Estamos muy satisfechos porque hemos resuelto los puntos críticos que quedaban una vez resuelto el trazado. Hemos dado un gran paso, resolviendo muchos de los problemas a los que se enfrentaba al proyecto”, ha mostrado su satisfacción Pradales.

ARTAZA, ENCLACE CRÍTICO

La gran dificultad a la hora de diseñar los accesos en ambos extremos ha sido el acceso de Artaza, que el propio Pradales ha definido como “enlace crítico” del proyecto. “Por muchas razones, pero fundamentalmente porque estamos en un entorno muy constreñido y muy condicionado por viviendas, un parque, una escuela, un instituto y la necesidad de dar todos los movimientos posibles de entrada a salida en una zona con esos condicionantes”, ha explicado.

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Este punto de acceso permitirá enlazar con el túnel bajo la ría desde los tres ejes principales que confluyen en esta glorieta: la carretera de La Avanzada, el corredor de Uribe Kosta y la entrada a Romo. Lo hará, además, de forma directa, en ambos sentidos, tanto para entrar como para salir del subfluvial y de forma soterrada, sin tener que entrar en la rotonda. “El acceso se realizará mediante ramales de entrada o de salida, de un carril, que discurrirán soterrados bajo la glorieta y salvan el desnivel entre la superficie y el comienzo del túnel, que ya queda enterrado en esta margen”, ha explicado el diputado foral. “Hemos querido buscar que todas las conexiones desde los grandes ejes sean directas, evitando así problemas de capacidad”.

AFECCIONES DURANTE LAS OBRAS

Para salir del túnel, en sentido La Avanzada se ejecutará un ramal bajo la vía lateral de esta carretera en sentido Bilbao desde el que se podrá llegar a Leioa y al túnel tras salir en superficie en un tramo en pendiente; hacia Uribe Kosta se aprovechará un paso subterráneo ya existente hacia Berango y Algorta con un trenzado en el tronco del corredor, y para la salida hacia Zugazarte se construirá una trinchera en la mediana del vial actual.

Para entrar en la infraestructura la configuración será similar: los vehículos que lleguen desde La Avanzada lo harán desde el margen derecho entre la incorporación desde Leioa al tronco principal y la salida al barrio de Artaza, desde Uribe Kosta aprovecharán las infraestructuras existentes por un paso inferior, y desde Zugazarte accederán desde la mediana, compartiendo la estructura con el ramal de salida del subfluvial.

El diputado foral ha admitido que durante el periodo de obras se producirán “afecciones” en la zona, como en todos los trabajos, pero una vez finalizadas el entorno recuperará su imagen actual, “respetándose el instituto, el colegio, el parque... La solución técnica, dentro de la complejidad, es muy exitosa”.

RAMAL EN VOLADIZO DESDE LA A-8

En el caso de Ezkerraldea, lograr encajar los accesos al túnel ha sido más sencillo de resolver, porque es un espacio más abierto, con menos condicionantes, “aunque los hay, como una gran industria como Nervacero, todo el nudo de comunicaciones que existe...”. La gran novedad, en este caso, es un gran ramal en forma de lazo que sobrevolará la A-8 y la Supersur para que los vehículos que llegan desde Cantabria por la autopista puedan acceder al subfluvial. “Permitirá descargar muchísimo la rotonda de Galindo y dará un acceso mucho más fluido y directo”.

Desde esta margen, el túnel conectará también de forma directa con los tres grandes ejes de comunicación que confluyen en la zona. El tráfico que abandone el subfluvial en Ezkerraldea podrá llegar al eje del Ballonti a través de la rotonda de Nervacero, y a la A-8 en ambos sentidos y la Supersur utilizando los ramales que ya existen.

En sentido contrario, habrá una entrada directa desde el eje del Ballonti mediante la rotonda de Galindo, que habrá que adaptar para permitir también el acceso desde la A-8 en sentido Cantabria y desde la Supersur.