- El alcalde de Portugalete, Mikel Torres, enumera las tres líneas de trabajo que "definen el presente y el futuro de la villa" y que consisten en conseguir una ciudad moderna, habitable y sostenible. Para ello están liderando proyectos de redes inteligentes y de eficiencia energética, con las personas en su objetivo, a través de la participación ciudadana y el voluntariado como herramientas, y teniendo como referencia siempre la accesibilidad urbana. Y más en un municipio en ladera como es Portugalete. "Hay instaladas 36 rampas mecánicas en cinco zonas del municipio, que permiten salvar importantes desniveles, y que suponen una importante reducción del uso del vehículo privado", dijo. Torres apuesta por una villa "para disfrutarla al aire libre". Destacar que apenas tiene tres kilómetros cuadrados de superficie, viven unas 47.000 personas y cuenta con casi 22.000 vehículos. "Por tanto, necesitamos seguir ganando el poco terreno que tenemos para el disfrute de la gente en la calle", indicó el primer edil jarrillero.
