Si las paredes de Bilbao hablaran, gritarían contra la violencia machista. Al menos eso es lo que han hecho las del muelle de La Merced, donde esta mañana se ha inaugurado un mural, obra de la artista Ruth Juan, en homenaje a las mujeres supervivientes de la violencia de género y sus hijos e hijas.

El alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, que asistió al acto acompañado de la concejala de Igualdad, Nekane Alonso, y una representación de la corporación municipal, ha destacado que Bilbao es el primer municipio de Euskadi en contar con un mural dedicado a este colectivo. "Está en el corazón de Bilbao y nos va a estar recordando desde la mañana hasta la noche que tenemos que seguir trabajando por sensibilizar a la ciudadanía, por construir esa memoria colectiva para que todos y todas sigamos trabajando juntos en contra de la violencia machista", ha explicado el alcalde, al tiempo que ha subrayado que con esta iniciativa se pretende también "reivindicar justicia y reparación".

Bilbao homenajea a las supervivientes de la violencia machista con un mural

Bilbao homenajea a las supervivientes de la violencia machista con un mural

"DEL POZO A SER CON TU PROPIA LUZ"

La autora de la obra, titulada "Supervivientes de la Violencia Machista", ha explicado, por su parte, que "el mural relata el dolor, la angustia, el sufrimiento, el miedo, la soledad, todo el proceso por el que pasan las mujeres supervivientes de la violencia machista hasta que se crea la red de apoyo con otras mujeres, ayudándose, empoderándose y creando colectivamente".

En su creación Ruth Juan ha representado a las mujeres a través de figuras desnudas de tres metros de altura porque en las reuniones mantenidas con algunas supervivientes "se hablaba mucho del cuerpo y las enfermedades que genera el sufrimiento, que tardan años en recuperarse, si llegan a hacerlo". Según ha señalado, su trabajo "está dividido en diferentes fases que van desde las violencias más sutiles a las más brutales, el pozo, que es tocar fondo, y luego empieza la parte de recuperación cuando te vas, alguien te da la mano y te conviertes en un ser con tu propia luz".

PEDIR AYUDA

A la inauguración han asistido también mujeres de la asociación Bizitu, que han servido de inspiración a la artista a través de sus testimonios. "Es muy importante que este mural sea muy visual y público para que muchas mujeres puedan verse reflejadas y puedan pedir ayuda si la necesitan", ha destacado Inma Mata, presidenta de Bizitu, quien ha valorado que la obra esté dedicada también a sus hijos e hijas. "La ley los reconoce ahora como víctimas directas, pero hasta hace unos años se reconocían un poco como daños colaterales. Son víctimas lo mismo que la mujer. Otra cosa es que todavía no se los acompañe de la misma manera. Es muy importante que se trabaje también para que puedan superarlo", ha reivindicado.

"NO ESTÁN SOLAS"

Gracias a que estas mujeres “han colaborado expresando su dolor, sus sentimientos, su sufrimiento”, la artista Ruth Juan, ha valorado el alcalde de Bilbao, ha podido plasmar en su obra “lo que otras mujeres nos están diciendo cada día a veces con su silencio, para que lo puedan reconocer, compartir y denunciar lo antes posible”. Aburto ha asegurado asimismo que “la erradicación de esta violencia machista representa una prioridad política” y, como muestra, el hecho de que “estemos aquí el conjunto de las fuerzas del Ayuntamiento de Bilbao” mostrando “nuestro apoyo colectivo para lograr esa tan necesaria reparación” de las víctimas.

En este sentido, ha lanzado el mensaje de que “en Bilbao las mujeres, sobre todo las que sufren la violencia machista, no están solas” y ha resaltado “lo importante que es el apoyo de las amistades, las familias, los entornos comunitarios más cercanos, las asociaciones de mujeres, pero también de la ciudadanía en general y de las instituciones para superar y terminar con esta violencia, que es de carácter estructural”.

“SE PUEDE SALIR”

La concejala de Igualdad, Nekane Alonso, ha señalado, por su parte, que esta obra, que “ya forma parte del patrimonio artístico de la ciudad", además de “un espacio de memoria, reconocimiento y reparación de todas las víctimas y supervivientes de la violencia machista”, es “una forma de denuncia, una muestra de empoderamiento, sororidad y búsqueda de la libertad de todas las mujeres”.

Según ha explicado, el mural “recoge de manera simbólica el ciclo de la violencia machista, un proceso que comienza cuando las mujeres se reconocen como víctimas, iniciando así el proceso de empoderamiento y de denuncia, seguido de la superación del daño pensando en la salida. Ese es el mensaje de esperanza que me gustaría resaltar, que, aunque no todas lo consiguen, de esto se puede salir. Serán las supervivientes, esas mujeres a las que hoy dedicamos este mural”.