- La hostelería de Meatzaldea dará este lunes siquiera un tímido paso adelante en la ansiada vuelta hacia la normalidad con la autorización de apertura de aquellos establecimientos que cuenten con terrazas donde atender a los clientes. Serán alrededor de un centenar de terrazas de muy diferente tipología y tamaño las que optan a reencontrarse con su clientela mientras que el resto de hostelería aún deberá esperar el avance de la desescalada. Mientras tanto los ayuntamientos de Meatzaldea han adoptado diferentes medidas fiscales y normativas para facilitar su reapertura.

En Abanto-Zierbena el Consistorio minero ha establecido un servicio directo y permanente con los 50 establecimientos de hostelería que existen en el municipio -cerca de 30 de ellos con terraza- a los que no se cobrará la tasa de ocupación de suelo público mientras dure la desescalada y el estado de alarma. Una medida fiscal que se acompaña a las ayudas a fondo perdido aprobadas para compensar el cierre del comercio en general con motivo del covid-19. "Estamos trabajando para que esta suspensión de pago sea hasta final de año", matizó la alcaldesa, Maite Etxebarria, quien dio cuenta además de la aprobación plenaria de una modificación de la ordenanza municipal que regula las terrazas como medida de apoyo imprescindible para los bares y restaurantes de Abanto-Zierbena. "Queremos permitir la instalación de nuevas terrazas así como la ampliación de la superficie que actualmente tienen asignada para que con la cuota de ocupación marcada en el protocolo de desescalada del 50% puedan mantener todas las mesas que tienen en estos momentos y así hacer más viable su reapertura", anunció Etxebarria.

En el caso de Muskiz, el Ayuntamiento, que exonerará de las tasas durante el estado de alarma a las 22 terrazas registradas, va a flexibilizar y ampliar en la medida de lo posible la ocupación de la vía pública en los locales que sea posible. "Ampliar el espacio sin incumplir la legislación no es nada sencillo en la mayoría de los casos, pero en los locales que sea posible, es nuestra voluntad dar la oportunidad de ampliar el espacio de forma temporal y desde el cumplimiento de la Ley", destacaron fuentes municipales que invitaron a los propios hosteleros a que "nos hagan llegar sus propuestas de forma individual para estudiar la viabilidad".

Por su parte, Trapagaran ha iniciado un trabajo de campo para ver las posibilidades de ampliación de las terrazas ya instaladas -14 de ellas con licencia municipal- y ha animado "a que aquellos hosteleros que crean tener espacio y quieran contar con terraza se dirijan al Ayuntamiento", señaló el edil de Hacienda, Javier Pérez, quien adelantó que se están ultimando ayudas económicas para aquellos establecimientos que se animen a la apertura. "De momento ya hemos aprobado una modificación del precio de ocupación que queda en un simbólico céntimo de euro el m2 y mes y cuya duración puede dilatarse en el tiempo". Finalmente, Ortuella, con más de una veintena de terrazas, no descarta autorizar barras exteriores.