Bilbao - El Gobierno vasco ha decidido instalar radares en el alto de Trabakua, en el término municipal de Mallabia, con el objetivo de controlar la velocidad de los vehículos que circulan por la zona, según anunció ayer el diputado foral vizcaino de Infraestructuras y Desarrollo Territorial, Imanol Pradales, durante una comisión de las Juntas Generales. La seguridad en el alto de Trabakua fue uno de los asuntos tratados durante la comparecencia, en la que Imanol Pradales compareció para dar cuenta de algunos de los tramos de la red de carreteras vizcaina más complicados.

El diputado respondió de esa forma a una pregunta de del grupo del PP en la Cámara vizcaina, que se interesó por posibles medidas previstas para reducir los accidentes en lo que consideran que es un “punto negro” de la red de carreteras vizcainas, puesto que, según dicha formación, se registran una media de 60 percances anuales desde 2010. En respuesta, el diputado Pradales explicó que tras las medidas adoptadas en esta carretera de montaña a finales de 2016 para reducir los accidentes -desde entonces ha descendido el número de siniestros en un 41%-, “no queda mucho margen de mejora” en el vial, donde, según apuntó el responsable de Infraestructuras y Desarrollo Territorial, lo que existe es un problema “de velocidad desmedida” por parte de determinados vehículos.

De esa forma, según los datos que aportó, un 13% de los usuarios sigue sin respetar la velocidad en ese tramo y de media se ha venido sancionando al 9% de los conductores que pasan por el alto de Trabakua, cuya intensidad media diaria es de 7.700 vehículos, el 14,4 % de ellos, además, son vehículos pesados. Ante esta situación, la Diputación Foral de Bizkaia solicitó a Tráfico del Gobierno vasco la instalación de radares en la zona para controlar la velocidad, solicitud que el Ejecutivo ha atendido, según reveló ayer el diputado.

Carretera N-636 Por otra parte, durante su comparecencia, Pradales explicó que la Diputación Foral de Bizkaia invierte anualmente unos 60 millones de euros en la conservación y mantenimiento de las carreteras del territorio en las que lleva a cabo diversas actuaciones como medidas adoptadas para reforzar y mejorar la seguridad de los viales.

Con dicho fin, la institución foral ha llevado a cabo entre diciembre pasado y primeros de enero distintas actuaciones en la carretera N-636 a su paso por Elorrio, según explicó el diputado de Infraestructuras y Desarrollo Territorial en respuesta a otra pregunta del grupo del PP, que recordó que los vecinos del barrio Iguria de esa localidad se han movilizado para pedir más seguridad en el citado vial.

En relación a las demandas de estos vecinos, Pradales apuntó que la Diputación remitió al Ayuntamiento de Elorrio dos alternativas diferentes sobre la habilitación de una senda peatonal en la zona y un paso peatonal con semáforos y deseó que se resuelva “algún fleco” pendiente con el Consistorio para decidir una solución concreta en una reunión que, según desveló, celebrarían horas más tarde con responsables municipales en la que tratarían el asunto. - DEIA