Una maestra que no enseña sino inspira
APRENDE, conecta, comparte, avanza. Las palabras caían sobre las presentes -en su inmensa mayoría eran mujeres...- como gruesas y refrescantes gotas de lluvia. Ese era el consejo que podía leerse en los carteles colocado por Professional Women’s Network Bilbao (PWN Bilbao) en su ciclo de conferencias Mujeres Inspiradoras, que ayer tuvo continuidad con la participación de la todopoderosa atleta paralímpica Teresa Perales en el Auditorium de la Torre Iberdrola. Más allá de sus plusmarcas mundiales y de la fecunda cosecha de medallas paralímpicas que atesora; por encima, incluso, de la medalla de oro al mérito en el trabajo o el doctorado honoris causa por la Universidad Miguel Hernández de Elche que adornan su provechosa vida, el secreto de su éxito es bien claro: jamás se pone una excusa.
Mujeres inspiradoras nació con la idea de darle voz a mujeres que sean iconos muy populares de su lucha por lograr un lugar de liderazgo en su carrera profesional y que ofrezcan las claves necesarias para que los jóvenes crezcan en talento y los profesionales sénior alcancen aquellas metas que quieran. La atleta, embajadora de la Fundación Telefónica y del Deporte Inclusivo en España, acudió ayer a Bilbao con una clave: no ser un modelo que coarta de tanto mirarla al espejo sino mujer que alienta, ser una maestra que no enseña sino inspira. Su vida es la constatación de que cuando dos caminos desembocan en el mismo bosque hay que tomar el menos transitado: eso marca la diferencia.
Su vida es un tapiz de Flandes que recrea a quien lo mira. Ayer lo hicieron Susana Villate, Carmen Zarate, vicepresidenta de PWN; Javier Benito, director de Telefónica Euskadi; Kirru Ossa, gerente de comunicación de Telefónica; Adela Ucar, la periodista encargada de entablar la conversación de la que se extrajeron jugosos frutos del conocimiento; Cristina Mendia, directora de Igualdad, Diversidad y Conciliacion y Manager EFR (Empresa Familiarmente Responsable) en Mutualia; Marian Andrés Acha, Marian Buján, Kepa Martínez Barañano, Begoña Arana, Olivier Lacha, Eva Marcos, Begoña Cerrato, Susana Prieto, Idoia Angulo, Isabel Bengoa, Adela Innenarity, Mónica Carballo, María Bordón, Itxaso Jáñez, Blanca Bárcenas, Amparo Villasante y un buen puñado de mujeres que se acercaron a tomar nota y escuchar una historia cargada con la pólvora de las hazañas.
El evento, organizado por PWN Bilbao -con la colaboración de Emakunde, Diputación Foral de Bizkaia e Iberdrola-, recogió el agua de los consejos de Teresa para regar otras vidas. “Lo importante es el trabajo que haces en el camino. No dejar de tomar decisiones por miedo a lo que pueda pasar”, dijo la mujer maravillas.
La escucharon con atención e interés Iratxe Celis, Marta Fernández Rivera, Beatriz Marcos, Aintzane López, Eunate Saiz, Salvador Blasco, Begoña Urresti, Rosa Mari González, Marta Fernández, Susana Aguinaco, Idoia Muguruza y una legión de nombres propios que se sumaron a un encuentro con un futuro que, bien mirado, no es sino una caja de oportunidades aún por estrenar. “Lo peor no son la barreras físicas sino las personas, como te miran” comentó, en algún momento de la tarde, Teresa Perales. Lo dijo, entiendo, echando un vistazo por los retrovisores. Hoy solo hay una manera de mirar a una mujer así: con absoluta y entregada admiración.