Plentzia - El comité de empresa de Metro Bilbao criticó ayer que la estación de Plentzia solo vaya a estar abierta durante el verano mientras se acometan las obras para el soterramiento del suburbano en Urduliz, unos trabajos que durarán sobre un año y medio. Según denunciaron los sindicatos, “durante aproximadamente 16 meses no habrá información, atención a clientes ni ayuda en la venta de títulos, ya que el personal de la estación no estará allí”.
Las labores para eliminar el paso a nivel de Urduliz -que comenzarán en abril de 2015 posiblemente, a tenor de lo expresado ayer por los sindicatos- obligarán a suspender el servicio ferroviario entre Sopela y Plentzia, de manera que mientras dure esta intervención, los usuarios de ese tramo de la línea 1 deberán hacer un transbordo en autobús. “Por si esto no fuera suficiente molestia, la dirección de Metro Bilbao pretende que durante los meses que no sean de verano, es decir, durante el tiempo de un curso escolar, la estación de Plentzia no cuente con personal de Metro Bilbao”, comunicó el comité de empresa durante el acto de protesta que llevó a cabo en la misma parada de Plentzia. “Queremos arrancar el compromiso a la dirección de Metro Bilbao de que la estación va a estar abierta todo el año”, insistieron los representantes de los sindicatos ELA, CIM, CC.OO., UGT, LAB y ESK.
Plentzia cuenta con tres personas de Metro Bilbao “que trabajan a turnos” y que con el cierre de la estación durante varios meses serían trasladadas a otros puestos. “El problema no es que vayan a echar a gente, sino que con esta decisión empeora la calidad del servicio y la atención al cliente. Para nosotros, un transporte público de calidad no tiene que fijarse en la cantidad de personas que lo usan, porque los pocos que lo puedan utilizar en un momento dado también pagan sus impuestos como el resto y tienen derecho a poder utilizarlo con todas las garantías”, agregó el comité de empresa.
Los portavoces de los empleados de Metro Bilbao hicieron hincapié en que “la estación de Plentzia y sus vecinos necesitan al personal en un contexto normalizado y más aún ante una situación degradada como es un transbordo en autobús de larga duración”.
Sonji, una de las personas que en la mañana de ayer cogió el metro en la villa de Uribe Kosta, defendía que los trabajadores del metro “son necesarios para ayudar, sobre todo, a las personas mayores o a las que, como yo, no son de aquí y pueden tener dudas”. Javier, otro viajero, consideró, sin embargo, que la decisión de cerrar la parada durante un tiempo no le parece “tan dramática”.