Cuenta la leyenda (¿o la realidad? Quién sabe...) que los reinos de la Atlántida formaban una confederación gobernada a través de leyes escritas en una columna de oricalco, en el Templo de Poseidón. Las principales normas disponían que los distintos reyes debían ayudarse mutuamente, no atacarse unos a otros y tomar las decisiones concernientes a la guerra, y otras actividades comunes, por consenso y bajo la dirección de la estirpe de Atlas. En su orgullo -y esta última visión sí que es mitología pura y dura...-, desafiaron a Zeus, que decidió hundir el reino bajo las aguas.
He ahí un mundo fantástico que contrasta, hasta cierto punto, con el restaurante Atlanta, que desde hace unos días cabalga a manos de Juanpa Beitia, toda una leyenda en Lekeitio y que llega a Bilbao con una carta repleta de tradiciones, de cocina elaborada bajo las recetas clásicas. Ubicado en Particular de Estraunza, el nuevo restaurante Atlanta parece el último reino del continente perdido, puestos como estamos en el país de la fantasía.
Lo que es real, es tangible, es el poder de atracción que posee Juanpa, digno de una piedra imán. En la puesta de largo no cabía un alfiler. Se sirvieron vinos de lujo -"¿Hay algo mejor que el vino? Beber es un acto que realizan las razas de linaje antiguo. Cuando se hace uso del vino (moderadamente como todas las cosas preciosas) es salud y medicina. El vino exalta la fantasía, hace lúcida la memoria, aumenta la alegría, alivia los dolores, destruye la melancolía, concilia el sueño, conforta la vejez, ayuda a la convalecencia, da aquel sentido de la euforia por donde la vida transcurre, leve, plácida, suave y tranquila" (extracto de una carta de Noe a sus descendientes que puede leerse en la página web del local)- y viandas a todos los presentes, con Armando Beitia y Agate Eiguren como compañeros de navegación de Juanpa.
A la llamada acudieron Amaia Gorostiza, Juan Elorriaga, Virginia Larrea, Amaia Rivera, Alazne Manzano, Santi Zuaran, Carmelo Sánchez Pando, Cecilio Gerrikabeitia, Mari Carmen Martínez, José Luis Basterra, Fernando Pedrosa, en nombre de DEIA, Ander de Aranbalza; el presidente de Unicef en el País Vasco, Carlos Epalza, Juan Carlos Egidazu, Ander Eiguren, Olatz Mendibelzua, Aitor Sarasketa, José María Rodríguez y un sinfín de amigos que navegaron entre lascas de bacalao, solomillo con foie, txistorras finas, queso con membrillo, setas bien horneadas y un sinfín de manjares y un sinfín de viandas con las que Juanpa, como si fuese un arrantzale que atraca en el puerto de Bilbao, anunció su llegada a la capital. Quienes conocieron su mano en el Hotel Beitia de Lekeitio aseguran que se va a comer el mercado. Yo creo que el prefiere que el mercado le coma a él. A lo que él cocina, quiero decir.